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Por Sergio Mabres. La inseguridad es uno de los temas que más preocupa a la sociedad argentina y en el mundo. En ese sentido, la tecnología ha tenido un rol destacado aportando cámaras, alarmas y otros productos/sistemas que ayudan a prevenir delitos. Pero tiene más para ofrecer. Veamos.
Las cámaras de la generación anterior sólo cumplían su propósito si eran monitoreadas. En la nueva generación de cámaras de vigilancia, el monitoreo se puede hacer desde su teléfono y por Internet (consejo: recuerde cambiar la contraseña que viene con la cámara sino es posible que se la hackeen).
También se avanzó en los mecanismos de compresión, almacenamiento y reciclado del espacio que usan los videos. Ahora, se almacenan en memorias compactas HD, MicroHD o discos externos USB, lo que evita el uso las cintas de video y un equipo especial más caro.
Aplicaciones sencillas pero de uso generalizado como WhatsApp han sido de mucha a utilidad para los vecinos que forman grupos por barrios o por manzana, a través del cual intercambian mensajes sobre autos, motos o personas sospechosas. Lea aquí un ejemplo reciente en Villa Parque Siquiman (Córdoba).
Las aplicaciones para publicar denuncias también ayudan a la “vigilancia colectiva”. A través de ellas, se puede informar o denunciar actitudes sospechosas, robos o vandalismo, agregando una foto y geo-referenciando el evento en un mapa.
Cuando estas aplicaciones se generalizan la Policía, por su cuenta, asigna personal para controlar las denuncias y destinar personal de calle al evento. La aplicación CityCop en Montevideo, por ejemplo, tiene más de 100.000 suscriptores y está creciendo rápidamente en Uruguay, Brasil y la Argentina. Para usar dicha aplicación en Córdoba sólo hace falta instalarla, registrarse y empezar a utilizarla.
Estas estrategias de “vigilancia colectiva” serán realmente eficientes cuando propicien la intervención directa de la Policía para disuadir o detener definitivamente a los malhechores. Los dispositivos de botón de pánico son un buen ejemplo de como una red de denuncia se conecta directamente con la central de policía más próxima. El problema es que gran parte de la sociedad no cuenta con este tipos de botones.
El último temporal que sufrió la provincia de Córdoba mostró una oportunidad para implementar la tecnología que ayude a prevenir las inundaciones. Por caso, se podrían colocar detectores, conectados a Internet, para monitorear el nivel de los ríos en las cuencas que, usando un chip de teléfono, disparen mensajes de alarma para que los vecinos que viven cerca de los cauces, puedan en ese autoevacuarse. Este tipo conexión entre varios dispositivo es lo que se conoce como la Internet de las Cosas (IOT).