El número es contundente: el déficit de la balanza de pagos alcanzó a U$S 5.294 millones en el primer semestre de 2013. A partir de ahí comienzan todas las especulaciones en torno de qué puede suceder con la soja y los alimentos que exporta la Argentina, que este año aportaron U$S 17.000 millones.
En el tradicional almuerzo mensual de Fundación Mediterránea, el economista Juan Manuel Garzón presentó un informe sobre qué puede suceder con los mercados agropecuarios en la Argentina y dijo porqué son más importantes que nunca los ingresos que pueda aportar la oleaginosa y sus derivados.
¿Qué pasará con la soja?
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Para el Gobierno: Aunque Garzón no lo mencionó, el Gobierno lanzó una presión sobre los productores agropecuarios para que vendan las reservas de soja en los silos-bolsa o consignadas en las cooperativas para hacerse de U$S 5.000 millones. Esa cifra es el déficit de la balanza de pagos (ingresos y salidas de divisas) del primer semestre.
Precios: La soja a mayo/2014 cotiza a U$S 482, 10% menos que en mayo último. El precio bajará en 2014, aunque aún resta resolverse el volumen de la campaña de Estados Unidos (generó preocupación la seca de las últimas semanas) y el consumo de China. Este año se mantuvo firme la demanda de bienes de consumo (alimentos subieron 5%), mientras que bajaron los de los metales (5%).
Puertos y rinde: Los precios agrícolas estarán más bajos en la próxima campaña. Se reducen los márgenes para el productor: pesan la distancia a los puertos y el rinde de cada región. Márgenes muy reducidos para Salta y el norte de Córdoba.
Poder de compra: La soja tiene 31% menos de poder de compra que en 2007, pese a que los precios internacionales subieron 60%. En la Argentina impactan la inflación y la suba de impuestos (retenciones: 35% al grano; 32% sobre aceites).
Con la misma soja, los productores compran 30% menos que en 2007, sostuvo el economista Juan Manuel Garzón. ¿Razones? El impacto de la inflación e impuestos (retenciones).
Materias pendientes: La baja de impuestos y un plan de estabilización son las materias pendientes del Gobierno, para lograr una mejora en la competitividad. ¿El Gobierno bajará los impuestos? «No lo sabemos», afirmó Garzón. Recordó que aceleró la tasa de devaluación (2,5% en agosto), pero también aumentó la inflación por efecto de una política monetaria expansiva.