Por Juan Turello. Los empresarios y los trabajadores que escucharon a Alberto Fernández en la planta de Nissan Argentina, en Santa Isabel, no podrían objetar las buenas intenciones desplegadas en su discurso, aunque los instrumentos sugeridos ponen en duda sus palabras, señala mi nota en La Voz. ¿Qué puede pasar con la marcha de la economía y la recuperación del salario?