Por Claudio Fantini. No sólo Irán tiene una policía de la moralidad. También Arabia Saudita y las demás monarquías oscurantistas del Golfo Pérsico cuentan con ese cuerpo represor, para cercenar las libertades más elementales de las mujeres, golpeándolas o apresándolas en la vía pública, por lo que consideran vestir de manera indecente.