Sumergidos en el «día a día», quizá los argentinos no han percibido los cambios en el contexto externo, que afectan a la economía.

La mayor producción de granos de Estados Unidos para la actual campaña y las menores compras de China, por caso, anticipan que difícilmente se repita un escenario de precios con la soja próxima a los 600 dólares en el mercado internacional. Ayer, la soja cerró a 502,48 dólares en Chicago, una suba en el disponible de 1,3% respecto al desplome de la semana anterior. Sin  embargo, para noviembre cotizaba a 448 dólares, lo que genera gran preocupación en el fisco y en los productores argentinos.

Precio mensual de la soja en el mercado de Chicago; Dólares por toneladas

 ¿Cuáles son los riesgos para la Argentina? 

■ El «boom» de los precios agrícolas difícilmente se repita en los próximos años.
■ Con los precios de Chicago para 2014, las exportaciones podrían caer o estancarse. ¿Qué criterio usará el Gobierno argentino para autorizar importaciones? ¿A qué ritmo se deslizará el tipo de cambio oficial? Sin dudas que habrá un escenario de mayores restricciones.

Estas advertencias fueron formuladas ayer por el economista Jorge Vasconcelos, vicepresidente del Ieral-Fundación Mediterránea, durante el almuerzo mensual. Señaló que el desafío para 2015 será conseguir «dólares genuinos» y mejorar la calidad del empleo.

 ¿Cómo impactarán las elecciones? 

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Según Vasconcelos, un triunfo amplio en las próximas elecciones permitirá a la dirigencia política imponer sus condiciones sobre la marcha de la agenda económica. Un triunfo ajustado, en cambio, obligará atender una agenda que combinará estos elementos:

■ Control de cambios versus mercado unificado.
■  Sustitución de importaciones versus economía abierta.
■  Presión tributaria versus incentivos a consumir e invertir.
■ Política social versus empleos privados formales.

  Otras definiciones que dejó el economista:

■ «Para controlar la inflación se necesita una política de estabilización y también atacar la distorsión de los precios relativos. Los granos reflejan 2/3 de los precios internacionales; las tarifas de gas y electricidad son entre 15 y 20% más baratas que en los países vecinos; los salarios en dólares son 30% más caros que en Brasil y la brecha cambiaria oscila en el 60%, que perjudica la marcha de la economía».
■ «Con subsidios por 100 mil millones de pesos anuales, las expectativas de inflación se autoalimentan por la emisión».
■ «Las exportaciones de manufacturas industriales (MOI) sólo alcanzan al 0,23% del comercio mundial».

  Elemento multimedia:

■  Presentación de Jorge Vasconcelos / Fuente: IERAL de Fundación Mediterránea.

Redacción Turello.com.ar

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