Con alegrías (¡grande Delpo!) y tristezas para los argentinos, los juegos de la modernidad se viven y sufren en todas partes, aunque se desarrollan en una de las ciudades más lindas del mundo.
Preparate, porque en materia de tecnología todo va a cambiar, y vas a estar en la cancha.
Debés saber que, a diferencia de años anteriores, los avances que existen en materia de calidad y velocidad de transmisión, la accesibilidad a la tecnología, todo ha hecho de estos Juegos Olímpicos un evento para disfrutar en familia y con amigos, desde cualquier parte del mundo. Hace algunos años, esto no sucedía.
Pero eso no es todo. Atos, una empresa internacional de servicios de tecnologías de la información y socio tecnológico global de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, se propuso indagar sobre su desarrollo y fue más allá: decidió proyectar a futuro los avances tecnológicos en materia deportiva hacia 2020, después de las Olimpíadas de Brasil.
En su nuevo informe, “Ascent at London 2012: a vision for sport and technology”, Atos describe cómo la tecnología cambiará radicalmente la forma de vivir el deporte por parte de los atletas, televidentes, espectadores y organizadores. En lo básico, se estima que los espectadores tendrán la posibilidad de ver la acción a través de los ojos del atleta eligiendo qué parte de la acción quieren ver, contará todos los detalles en la pantalla de su casa, incluyendo un cronómetro que mostrará a qué velocidad corren los atletas. Y para alegría de los más fanáticos, podrán competir con los deportistas, saltando en forma virtual al campo, donde se mezclarán las transmisiones en directo con las competencias en vivo.
En el estadio, los espectadores podrán conocer información que no se transmitirá en los medios de comunicación; tendrán imágenes accesibles con visiones mucho más cercanas al campo de juego; compartirán la experiencia en tiempo real con su familia y amigos e, incluso, serán capaces de comprar comida o material del evento por medio de los celulares.
Pero esto no termina acá. Los atletas también disfrutarán de los beneficios de la tecnología: podrán recopilar más información sobre entrenamientos, contrincantes, lesiones, indumentaria, auspiciantes y, por supuesto, hacer uso de nuevas herramientas que promuevan las redes sociales para crecer y darse a conocer.
Más allá del 2020, los atletas competirán mediante hologramas, en la misma carrera aún estando físicamente en países diferentes. Hoy, suena increíble, ¿no? Pero el futuro dirá…