Luego de más de tres horas de reunión, entre las 19.30 y las 22.30, la presidenta Cristina Kirchner insistió anoche en que el plan Procreauto sigue, pero aún no hay acuerdo con las terminales automotrices sobre precios y cómo se pagarán las importaciones de autos y piezas.

La continuidad del programa financiado por el Banco Nación fue la única certeza de la extensa reunión, que proseguirá hoy entre funcionarios del Gobierno nacional y representantes de  las fábricas.

Cristina Kirchner saluda a Cristiano Rattazzi (Fiat) en la reunión con las terminales automotrices | Foto: Clarín.

Para la gestión de Cristina Kirchner es clave el programa para sacar al sector de la caída en la producción y las ventas. En ocho meses, se fabricaron 133 mil autos menos que en 2013, en tanto las concesionarias vendieron tres de cada cuatro unidades que facturaban el año pasado.

La discusión está centrada en que las automotrices quieren un aumento en el precio de los modelos y que el Gobierno les autorice los dólares necesarios para importar los modelos y piezas incluidos en el plan. Las autoridades analizarán «caso por caso» el tema de los dólares. En varias marcas, faltan vehículos que se fabrican en Brasil.

Ayer, al revelar una nota de ACARA, la Presidenta acusó a la empresa Fiat de desalentar la adhesión al plan oficial.

La fuerte caída en las ventas (30% en agosto y 25% en ocho meses) preocupa al Gobierno por el clima de despidos y suspensiones que se advierte en las terminales, autopartistas y concesionarias. La UOM Córdoba denunció ayer que se perdieron 400 empleos desde enero. Esta semana las suspensiones en el sector afectarán a más de 3.500 operarios.

El problema para la importación de modelos desde Brasil y autopartes es la deuda que tienen las terminales argentinas con sus casas matrices y plantas en el exterior, que alcanza a unos 2.500 millones de dólares.

El Gobierno les propuso la solución de «1×1», que equivale a un dólar de importación por cada dólar exportado, o que compren las divisas en el mercado. Esta operación -conocida como «contado con liqui»– cotizaba ayer a 13,38 pesos, lo que supone para las fábricas incrementar sus costos en más de un 50%. El dólar oficial cerró a 8,48 pesos.

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Redacción Turello.com.ar

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