Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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Horas antes de la crucial reunión entre el Gobierno nacional y la CGT, que reclama medidas para desactivar un paro, las autoridades lanzaron una tarjeta social en Córdoba para 69 mil familias indigentes.
El acuerdo entre los gobiernos de Juan Schiaretti y Mauricio Macri prevé la entrega de una tarjeta para las compras en supermercados. La administración nacional aportará 150 pesos y la Provincia, 450 pesos. Las compras con esta tarjeta tendrán una bonificación del 5% si se efectúan en supermercados o almacenes adheridos, por lo cual los 600 pesos se transformarán en 630 pesos para el titular de la tarjeta.
El plan, que se aplicará también en el conurbano bonaerense y en Rosario, entre otras ciudades, beneficiará en Córdoba a 69 mil familias indigentes, es decir que sus integrantes ganan menos de 4.930 pesos mensuales. La tarjeta se complementará con otras acciones, como el Paicor y el plan «Más leche, más proteínas», con las cuales se espera que esas familias logren una subsistencia digna.
Comenzará a regir el 1° de noviembre y demandará más de 521 millones de pesos anuales.
La acción de ambos gobiernos tiende a descomprimir el clima social luego de que se conocieran los datos oficiales sobre pobreza e indigencia. Según el INDEC, al cabo del segundo trimestre del año, uno de cada tres argentinos es pobre, mientras que de este universo, uno de cada cinco vive en la miseria, es decir, no consume los alimentos mínimos para la subsistencia. Dos de cada cinco argentinos hasta 14 años vive en la pobreza.
La publicación del padrón de beneficiarios se efectuará el próximo lunes 17 de octubre. Para mayor información, los interesados podrán dirigir su consulta por teléfono (0800-555-8555); vía web (www.cba.gov.ar) o en el Ministerio de Desarrollo Social, Av. Vélez Sarsfield 2311, ciudad de Córdoba.
Los gremios enrolados en la CGT serán recibidos hoy por las autoridades del Ministerio de Trabajo de la Nación, que debería acercarles respuestas en torno de los reclamos para la reapertura de paritarias, un bono de fin de año para todos los sectores y la mejora de los programas sociales.
En la CGT conviven distintos sectores, algunos de los cuales están identificados con el kirchnerismo. Éstos son los que expresan las posiciones más duras en relación con llevar a cabo una huelga general para reclamar un cambio en la política económica. Sin embargo, además de ese reclamo público, cada gremio tiene un reclamo en particular con las decisiones del Gobierno. Es el caso de Camioneros, dirigido por la familia de Hugo Moyano.
En las últimas horas trascendió que la Iglesia le habría pedido a la CGT que deje en suspenso el paro a la espera de la reunión que el papa Francisco mantendrá el próximo sábado con el presidente Macri en Roma, en la jornada previa a la santificación del Cura Brochero.
Escuchá la posición de Oscar Ruibal, dirigente de la UEPC, sobre el reclamo de la reapertura de paritarias y un bono para fin de año.