Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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El éxito del 8° Salón Internacional del Automóvil, realizado en Buenos Aires, reflejó las expectativas de las terminales en lograr este año ventas por encima de las 800 mil unidades y aumentar la producción de entre 10 y 15% con respecto a 2016. Esos son, al menos, los planes de Volkswagen Argentina, que incrementó sus ventas en 31,7% en los cinco primeros meses del año y espera mantener por 14° año consecutivo su liderazgo en el país.
La confianza y el buen momento en ventas lo refleja María Ángela Stelzer, directora de Asuntos Corporativos de Volkswagen Argentina, quien dialogó con Los Turello –en el marco del Salón del Automóvil- sobre los planes de la compañía. Sus definiciones más importantes.
“Este año puede un ser muy buen año para la industria, que puede llegar a comercializar 800 mil unidades o más, quizás 850 mil. La producción puede estar entre 10 y 15% por encima de lo fabricado en 2016 (470 mil unidades), aunque para ello dependemos de la recuperación de Brasil”, se entusiasma Stelzer, quien no deja de hacer nota para la fábrica alemana el éxito de la preventa de la pick up Amarok V6, recientemente presentada en la Argentina y que se exportará a mercados internacionales.
El 50% del valor de los vehículos que se producen en la Argentina corresponde a impuestos. La clave es bajar esta carga para 2023 y llegar al millón de unidades.
La funcionaria de Volkswagen se expresa con entusiasmo sobre la reunión que las terminales mantuvieron con funcionarios del Ministerio de Producción, que encabeza Francisco Cabrera, para alcanzar la meta de un millón de unidades en 2023.
“Se han constituido comisiones de trabajo para trabajar en temas de producción y competitividad. Vamos a llevar propuestas con la participación de todos los sectores, incluido el gremial”, relata.
A la hora de identificar los desafíos, Stelzer sostiene la necesidad de “bajar los costos impositivos de distinto orden (nacionales, Ingresos Brutos, municipales, etcétera), que determinan una carga impositiva del 50% en el valor del auto en el país y entre 15 y 20% en los vehículos exportados”. “Es necesario trabajar también en bajar el costo laboral, que no es el salario nominal, así como mejorar las condiciones de infraestructura y logística para que seamos competitivos y podamos exportar al mundo”, subraya la directora de Volskwagen.
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La terminal emplea 6.200 trabajadores, incluidos los de la fábrica de cajas de cambio que se producen en Córdoba. El desafío es combinar el desarrollo de una producción moderna (sólo en carrocería funcionan 320 robots y 600 sensores), con las capacidades del personal empleado.
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En el Salón del Automóvil, Volkswagen presentó sus próximos lanzamientos: el Pepper Up, que estará en julio en los concesionarios; el Golf Ferre y el nuevo modelo del Tiguan. Ambos llegarán en noviembre.
Stelzer admite que la sobreoferta de vehículos en otros países plantea en la Argentina una guerra de promociones, lo que empuja las ventas de vehículos importados. «La competencia es muy fuerte en los segmentos A y B (pequeños y meidanos)», admite. El 30% de las ventas se realiza a través de planes de ahorro previo. Con Brasil, el déficit está 30% por encima de lo permitido en el acuerdo automotor, que es de 1,5 dólar importado por cada dólar exportado.