Seguramente no sos el único que reserva la corbata para ocasiones realmente especiales como un casamiento, una entrevista laboral o una reunión con «gente importante». En el caso de la mujer, ¿cada cuánto llevás pollera, can-can y stilettos?. Ni hablar si es de uso frecuente el transporte público, ir vestido de manera tan formal al trabajo puede resulta incómodo y descolocado con el resto de tus compañeros.

Según un informe de la consultora Adecco Argentina, la formalidad en la vestimenta laboral ya pasó de moda para las nuevas generaciones. Cada vez son más quienes optan por zapatillas similares a zapatos, sacos con camisa o remera y jeans. Las mujeres aún siguen manteniendo un grado de formalidad al vestirse, pero lo combinan con las últimas tendencias y abandonan el taco aguja y la pollera tubo por un rato.

“La gran mayoría de los ámbitos laborales está incorporando una tendencia elegante sport que a los empleados les resulta más cómoda, les permite sentirse mejor y por ende, valoran este código de vestuario más informal” destacó Pablo Liotti, Gerente de Marketing y Comunicación de Adecco Argentina.