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Por Eugenio Gimeno Balaguer. Recuerdo una vez más a mi amigo poeta que decía: ❝lo malo son esas penas que sin matar nos maltratan, las que de un golpe nos matan, esas sí que son las buenas❞. Y es que uno no sabe si la agonía es la que sufre el gobierno o la que nos está haciendo sufrir a los ciudadanos. Y entonces, la metáfora va a lo que mucha gente anhela cuando se le presentan esas situaciones horribles, que es morir de golpe, sin sufrir, y no de una lenta agonía. Es curioso visualizar por parte del gobierno acciones ampulosas cuya comparación puede asimilarse a los estertores, unos ruidos respiratorios que se producen al final de la vida, muy intensos.
Agonía según el diccionario es el estado que precede a la muerte con el antecedente de una angustia o dolor muy intensos. También dice que es la decadencia que presagia un final de una sociedad o movimiento, o de un gobierno. Algunos autores la consideran como la última fase de la vida, otros como la primera fase de la muerte. Otros la definen como el «Pródromos de la Muerte❞, es decir, el paso intermedio entre la vida y la muerte.
Si bien la agonía puede o no ser duradera, por lo general se la asocia a un estado irreversible, que culmina con la muerte, pero eventualmente puede producirse una recuperación o mejora de la salud.
❝Qué difícil es encontrar una sonrisa❞.
En estos tiempos recogimos de la gente de la calle, de los medios televisivos y de algunos analistas sociales, la reacción de la gente en la vida cotidiana y que resumen en ❝qué difícil es encontrar una sonrisa❞, ❝cada día se vuelve más difícil❞.
La interdependencia está presente en toda la comunidad, es decir que la decisión de cualquiera influye en el resto; más aún si las decisiones vienen del gobierno.
Cuando las cosas se complican es porque realmente son muchas las dificultades, o porque la gente que tiene que tomar decisiones y resolver problemas no sabe hacerlo. A veces pedir ayuda es un principio de parar la agonía y recuperar la salud. ¡Cómo nos cuesta dar y pedir ayuda para intentar al menos salir de la agonía!
¡Qué ciudadano no quisiera tener un gobierno del cual enorgullecerse porque aporta fuertemente a la convivencia que anhelamos!