Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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El primer debate presidencial –un paso adelante en la democracia argentina– dejó una audiencia récord, numerosas preguntas sin respuestas por parte de Daniel Scioli y Mauricio Macri y una deuda para el interior, ya que las provincias estuvieron ausentes de casi totalidad de las referencias. Buen parte de la discusión se centró sobre las administraciones de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (C.A.B.A.) y la provincia de Buenos Aires.
Un repaso de los 10 datos principales.
1. Palabras duras, pocas propuestas. Los dos postulantes cruzaron duras acusaciones y chicanas sobre sus respectivas gestiones. Se esperaba que Scioli lanzará «el primer golpe verbal» pero sorprendió Macri. No obstante, el candidato del Frente para la Victoria (FPV) atacó con el latiguillo de que Macri “hará una megadevaluación, el ajuste que propone el FMI y el pago a los fondos buitres”. El líder de Cambiemos se defendió señalando “parecés un panelista de 678”. En la mitad del debate, Scioli lanzó otra frase resonante: «no pudo con los trapitos (en la C.A.B.A.) y quiere luchar contra el narcotráfico».
#ArgentinaDebate | Las chicanas de los candidatos ► https://t.co/GpEw9hJOLQ pic.twitter.com/MyMS5SkEQ7
— INFOnews (@INFOnews) noviembre 16, 2015
2. El interior ausente. Gran parte de la casi hora y media que duró el cruce obvió la situación del interior, salvo cuando se aludió al norte argentino y al narcotráfico en Rosario, pero de manera tangencial. El debate se planteó sobre problemas y esperanzas que afligen a dos grandes distritos electorales: CABA y provincia de Buenos Aires. El interior perdió el debate.
Señores somos un país, no es solo Buenos Aires. #ArgentinaDebate — Lucas Ruffini (@LucasRuffini) noviembre 16, 2015
3. Scioli no contestó sobre la herencia que recibirá de la actual administración, pese a ser el candidato oficialista. Tampoco si denunciaría las violaciones a los derechos humanos en Venezuela y si anularía el referéndum con Irán, como le preguntó en forma directa el postulante opositor.
4. Macri no contestó sobre qué hará con el dólar, la actualización del valor de los servicios públicos y el impacto que tendría sobre los alimentos la eliminación de las retenciones sobre granos como el trigo y el maíz. Ni tampoco una respuesta contundente sobre el tema de derechos humanos.
5. Grandes temas ausentes. La corrupción y el caso Nisman –ejes de las críticas de la oposición- no aparecieron en las menciones de Macri. Quizás porque los temas no despiertan hoy gran interés entre los electores. Tampoco se aludió a la desigualdad social ni a la inserción de la Argentina en un mundo conflictuado. No hubo menciones directas sobre Cristina Kirchner, que Scioli cortó de plano cuando dijo que ese Gobierno terminaba el 10 de diciembre y comenzaba otro eventualmente con su gestión. Faltó una discusión a fondo del tema económico.
6. Audiencia récord. Si se suman las televisiones abierta y por cable, más de la mitad de los televisores se encendió para ver el debate de la segunda vuelta. Por momento el debate superó los 53 puntos de rating aunque, durante a lo la largo de la transmisión, promedió los 51. Durante el evento la cantidad de tuits, bajo el hashtag #ArgentinaDebate, supero los 1,5 millones. Lo anterior, tiró por el piso ese prejuicio de que a los argentinos no les interesa demasiado la política.
#Rating > El PRIMER DEBATE PRESIDENCIAL tocó los 53.0 entre el AIRE y CABLE. #ArgentinaDebate — RealTimeRating (@RealTimeRating) noviembre 16, 2015
#GanóTwitter — Sebastián Grandi (@sebasgrandi) noviembre 16, 2015
Tweets con menciones a #ArgentinaDebate durante el debate presidencial de segunda vuelta https://t.co/U6umA1nuFs https://t.co/dpkNJU0kgu
— TwitterLatAm (@TwitterLatAm) noviembre 16, 2015
7. No tan relajado. En buena parte del debate se vio a Scioli con un rostro de preocupación. No lució relajado ni tuvo momentos de humor para responder las preguntas duras de Macri. Pareció sufrir más que su oponente.
8. Más Suelto. Demostró una mayor soltura durante los cruces, quizás fruto de su experiencia de haber participado en cinco confrontaciones anteriores. Se dirigió a la audiencia y sólo giró su rostro a Scioli cuando le preguntaba sobre sus exposiciones. Al mandatario bonaerense quizás le jugó encontrar que sólo registraba una actuación en un debate durante una confrontación en un estudio televisivo cuando se presentó como candidato a diputado nacional. En pocas ocasiones habló en forma directa al televidente.
9. ¿Quién perdió? Las primeras encuestas –difundidas anoche, por varios medios de comunicación- mostraban que un candidato había perdido por abrumadora mayoría el debate. Más allá del rigor estadístico y metodológico de esas muestras, lo cierto es que Scioli no dio la imagen de superar a Macri.
10. ¿Quién ganó? ganó la democracia. Este nuevo debate sienta antecedente para las futuras elecciones del país y significa un nuevo paso en el camino del diálogo.