Por Eugenio Gimeno Balaguer, desde Lima, Perú. Estoy en la capital peruana, donde muchos años que no venía, asombrado por su crecimiento y la calidad humana que se nota en gran parte de la sociedad, aunque en lo general padece una realidad similar a la nuestra.

Aunque Perú asombra por su crecimiento aún persisten fuertes desigualdades | Foto: paratoursperu.com

Mi mente se remonta a la efervescencia electoral en la Argentina y pienso que todos nos ahogamos un poco cada día cuando traicionamos lo que en realidad somos, o cuando no podemos desarrollarlo, o cuando no nos animamos. La alegría, el afecto y la frontalidad es la forma de estar en el mundo, y por tanto de estar en el trabajo.

Las elecciones nacionales en Perú se realizarán en marzo de 2016, por lo que están en plena campaña. Me llama la atención las grandes pintadas PPK (Peruanos Por el Cambio), pero la K viene por Keiko Fujimori, la hija del ex presidente a quien muchos ven como virtual triunfadora pese a las peleas verbales con Mario Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura.

❝Con sus asambleas de otoño en Perú, regresan las reuniones del Banco Mundial y el FMI a Latinoamérica después de 50 años❞

Esta semana se realiza la reunión anual de otoño el Banco Mundial (BM) y del Fondo Monetario Internacional (FMI), que congregara a las más altas autoridades económicas y políticas de 188 países. Prevén 12 mil visitantes extranjeros y 200 autoridades que se estima llegarán a Lima, entre ministros de Economía y presidentes de bancos centrales, así como funcionarios de organismos multilaterales, agencias de cooperación y desarrollo, ejecutivos privados, banqueros y líderes empresariales y académicos. Así, Perú se convertirá en «la capital económica del mundo durante siete días».

Se reflexionará sobre la coyuntura actual y los retos que plantean la desaceleración de la economía china; la lenta recuperación de Estados Unidos y de la zona Euro; la caída de los precios de los commodities y la lucha contra la pobreza.

Las reuniones anuales del Banco Mundial y el FMI regresan a América Latina después de casi medio siglo, el último país anfitrión fue Brasil en 1967. Aquí se opina que es un orgullo que Lima haya sido escogida, que -afirman- representa el reconocimiento a los logros de la internacionalización de la economía y continuo crecimiento durante 15 años.

Ello significará para el entorno económico nacional una oportunidad sin precedentes para atraer inversiones, mostrar el potencial del país para hacer negocios, generar redes de contactos tanto para el sector privado, académico, investigadores, como para el sector público..