Por Juan Turello. ❝Pasé agosto, es un alivio; ahora me quedan diciembre y enero cuando hay que pagar sueldos, aguinaldos y vacaciones❞. Un empresario del sector gráfico razonaba así ante La Voz del Interior en un reciente acto conmemorativo del Día de la Industria.

Desde la otra vereda la preocupación es similar: los trabajadores necesitan saber cuándo cesarán las suspensiones y los despidos.

Alimentos y servicios (las últimas facturas de gas) alimentan una inflación, que ronda  el 40% anual | Ilustración: archivo Turello.com.ar

Para las consultoras privadas, el desempleo está en el orden del 10%, muy lejos del 7,5% que midió el Indec. Alejandra Torres (Idesa) advierte que los más de 400 mil trabajadores que se retiraron del mercado laboral sufren el “efecto desaliento”, al no conseguir un empleo bien remunerado y dentro de sus expectativas.

La industria se halla estancada desde hace 12 meses y en “la década ganada” apenas creció su participación en el producto interno bruto (PIB). El economista Gastón Utrera advierte que la producción se expandió 80% desde 2003. Sin embargo, la participación en el PIB apenas pasó del 19,4 al 19,8%.

❝Hemos creado un nuevo tipo de buitre, que no ataca a las empresas muertas, sino a las vivas❞, advirtió Isabel Martínez (CIMCC).

❝Fue una década empatada❞, sentenció Isabel Liliana Martínez, titular de la Cámara de Industriales Metalúrgicos. ❝Hemos creado un nuevo tipo de buitre, el no carroñero, que no ataca a las empresas muertas, sino a las que están vivas. Que aumenta la conflictividad laboral, que aumenta las alícuotas de las ART, que nos embarga las cuentas sin control judicial, que nos corta la luz, el gas❞, sentenció.

Ercole Felippa, quien dejará esta semana la presidencia de la Unión Industrial de Córdoba, sigue lamentando que el Gobierno no haya trabajado en proveer mejores instrumentos para pasar de exportaciones de bajo valor agregado –unos 700 dólares la tonelada- a manufacturas más elaboradas. La tonelada que exportan los países industrializados vale 4.500 dólares.

Trabajadores y empresarios cuentan que aún faltan 458 días para el recambio presidencial y se interrogan –como ya lo hizo Cristina Kirchner- si la Argentina no vivirá ❝un diciembre caliente❞.

El Gobierno logró amortiguar la trepada del dólar, que terminó a 14,05 pesos, luego de que los bancos comenzaran a desprenderse del 10% de su capital en bonos dolarizados y de que se elevara a un sueldo mínimo de 8.800 pesos la exigencia para que un asalariado pueda comprar “dólares ahorro”.

Ambas medidas son un parche a la avidez de los argentinos por el dólar. La inflación de los últimos 12 meses fue de 38,3% según el sitio Inflación Verdadera. Hay expectativas de una “devaluación como enero”, por la diferencia entre la suba del dólar paralelo y la tasa de interés (25% ) y la caída en las exportaciones, que aportará pocos dólares este semestre. La falta de divisas subyace en la falta de autos y piezas importadas.

Mientras, la inflación y la recesión se hacen insoportables. Más aún la falta de respuestas del Gobierno.■

Juan Turello

Periodista. Escribe en Turello.com.ar y participa en Los Turello (Canal C, Córdoba). Columnista económico en el diario La Voz del Interior y en el programa "Pura Verdad" (Radio Pulxo, 95.1). Realizó coberturas en el país y en el exterior. Jugó al fútbol; ahora practica golf.