Ese fue el diagnóstico de Daniel Scandizzo, impulsor de la consultora AXIABIZ, al definir la coyuntura que atraviesan muchas de las PyMEs (Pequeñas y Medianas Empresas) industriales en Argentina, sobre la base de “cuatro análisis” de la rentabilidad, el financiamiento, el mercado y la tecnología.

A pedido de Sebastián Turello, el especialista hizo una analogía entre la medicina y el management en el segmento denominado “La Clínica PyME” de Los Turello. Allí, Scandizzo tomó como referencia para el estudio a las PyMEs industriales que emplean entre 50 y 100 personas. “Estas empresas son las más complicadas en este momento”, advirtió.

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Asimismo, explicó que esta clase de empresas se encuentra en «sala intermedia» como consecuencia de una serie de factores. A saber:

1] La erosionada rentabilidad debido a la imposibilidad de las PyMES de trasladar la totalidad de los incrementos de sus costos a los precios.

2] Los altos costos del financiamiento y el alargamiento del “ciclo operativo”.  Entendido este último, como el período comprendido entre la recepción de la materia prima (en el caso de las PyMES industriales) y el cobro de las ventas. “Hoy la cadena de pagos se ha dilatado. El problema es que al ciclo operativo hay que financiarlo. Por ejemplo, las tasas para financiar transitoriamente el capital de trabajo vía descubierto rondan entre un 30 y 40% anual”, advirtió Scandizzo.

3] El alicaído mercado interno como consecuencia de la contracción de la actividad económica y la pérdida del poder adquisitivo de los compradores. Con respecto al mercado externo, el consultor aclaró que “de cada 100 dólares que ingresan al país, producto de exportaciones, 90 los generan las grandes empresas (…) Sólo el 16% de las PyMEs son exportadores. En la última década, de cada 10 PyMES que exportaban cuatro dejaron de hacerlo”, apuntó el entrevistado.

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4] El rezago en la incorporación de tecnología. Según Scandizzo, “las PyMEs argentinas destinan, en promedio, menos del cinco por ciento de sus ventas en la incorporación de TICs (Tecnologías de la Información y la Comunicación)”.

Prescripciones para las PyMEs

Frente a este diagnóstico ¿qué pueden hacer las PyMEs?

Scandizzo sugiere aplicar “el tratamiento de los tres círculos: el externo, el intermedio (o sectorial) y el interno de la empresa”. Con respecto a los dos primeros, propone fortalecer el sistema inmunológico de las PyMEs frente a las variables externas y la coyuntura sectorial.

¿Cómo? Una alternativa es utilizar las herramientas disponibles en el círculo interno.

En este marco, Scandizzo aconseja defender la rentabilidad haciendo sintonía fina con el efectivo y reduciendo el ciclo operativo a través de la gestión de stocks y de las cuentas a cobrar. Además, recomienda que los gerentes financieros hagan “crossfit” moviéndose de manera continua entre el control presupuestario y el seguimiento de los tableros, pero involucrándose en la estrategia.

Por último, Scandizzo invitó a las PyMEs a redefinir los productos/servicios que ofrecen al mercado, enfocándose en el cliente, y a incorporar ágilmente tecnología para optimizar los procesos mencionados.

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Redacción Turello.com.ar

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