Por Juan Turello. El buen momento de la Argentina en los mercados financieros y las palabras de elogio de figuras y organismos internacionales dejan atónitos a miles de argentinos, quienes presienten que hasta ahora el modelo elegido por Javier Milei no los incluye, señala mi nota en La Voz.

Hasta Mauricio Macri reconoció en Córdoba que “la herencia recibida por Milei” era peor al “presente griego” que el kirchnerismo le dejó en 2017. En ambos traspasos hubo un denominador común: inflación contenida con fórceps (en 2023 estaba a punto de disparar una híper), el irreal valor del dólar, descontrol de las variables monetarias y financieras, trabas en la economía (hasta la provisión de insumos para la salud estaba en jaque), además de un largo etcétera. ¿Cómo estamos ahora?

El modelo inversor

El modelo que eligió Milei no tiene nada que ver con mejorar los sueldos de jubilados y de estatales, el reparto de subsidios a la industria ni con fomentar los planes sociales.

El esquema de Milei se basa en la inversión privada en petróleo, en minería (estarían a punto de destrabarse proyectos millonarios en cobre) y en la agroindustria.

Los inversores, al igual que el Fondo Monetario Internacional (FMI), pretenden ver primero cómo hará el Gobierno para desarmar el cepo.

La diferencia entre la cotización del billete oficial y los dólares financieros -alrededor del 12%- es clave para decidir proyectos que exigen una inversión multimillonaria, con márgenes de ganancias muy ajustados.

Además, aún pesan las restricciones para el giro de utilidades. “Es simple: el que pone dólares, quiere saber cuándo los podrá retirar, con una ganancia adicional”, señaló un asistente al congreso nacional de áridos (minería) que se realizó en Córdoba.

De cuatro sectores clave -litio, oro y plata, cobre y materiales industriales-, Córdoba puede aportar para la construcción y el desarrollo de infraestructura.

Este último grupo soporta una caída del 30%. Sin embargo, los asistentes destacaron que la provincia tiene las fábricas imprescindibles para la construcción de proyectos en petróleo, en gas y en minería.

La demanda de empleo crecerá en áreas alejadas de los grandes centros urbanos, salvo en servicios.

El conurbano -núcleo de la desocupación y de la pobreza en el país- no tendrá mejoras en el corto plazo. El kirchnerismo apostaría allí, donde hay millones de votos en una geografía hostil al modelo actual.

No todos están de acuerdo

La presencia de Ricardo Quintela en territorio cordobés -visitó la fábrica Blangino- demuestra que no todos los sectores económicos están de acuerdo con el modelo elegido por el Gobierno.

Mosaicos y adoquines son necesarios en la obra pública y en la privada, que también retrocedieron un tercio en relación con 2023.

Quintela firmó un acuerdo para impulsar el consumo con el uso de los bonos “Chachos” en las ventas que se efectúen en La Rioja.

Blangino es solo la punta del iceberg de las pymis ligadas al mercado interno, que no viven la euforia de los mercados ni esperan un “derrame” de los grandes proyectos.

¡Ay el consumo!

La pinza se cierra con una caída del consumo, que apenas da señales de una leve recuperación en la comparación intermensual.

La medición interanual no es aconsejable porque esa base de datos se amplió ante la incertidumbre de la elección presidencial y al temor de una escalada inflacionaria.

Las fotos de un año atrás con supermercados y locales de construcción desbordados certifican la irrealidad de esa comparación.

En agosto, las ventas en supermercados (0,2%) y en locales mayoristas (2,2%) mejoraron en relación con el mes anterior. En la comparación interanual, la caída superó 10%.

Ambos modelos -el de la inversión y el de consumo con anabólicos desde el Estado- tienen sus pros y sus contras. Hasta ahora, la sociedad está dividida en cuanto a sus resultados.

Juan Turello

Periodista. Escribe en Turello.com.ar y participa en Los Turello (Canal C, Córdoba). Columnista económico en el diario La Voz del Interior y en el programa "Pura Verdad" (Radio Pulxo, 95.1). Realizó coberturas en el país y en el exterior. Jugó al fútbol; ahora practica golf.