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Mayo comenzó con un panorama social complicado. La UOM -al frente de la CGT kirchnerista- para por 36 horas desde este miércoles al mediodía. Los aceiteros lanzaron una huelga por tiempo indeterminado. Y los bancarios no atenderán al público en las dos últimas horas del miércoles y el jueves.
A todo esto, el anuncio sobre Ganancias agrava las inequidades en el impuesto. Veamos.
El paro de la UOM. Es uno de los gremios más poderosos; está identificado con el actual Gobierno y cómo se resuelva su paritaria, será una señal para los sindicatos que están negociando aumentos de sueldos. La huelga comienza mañana miércoles al mediodía y se extenderá por 36 horas. La UOM pidió 32% y las cámaras metalúrgicas ofrecieron 24%. Los empleados de comercio también tienen trabada su paritaria porque el Gobierno no quiere homologar una suba de 30%.
Bancarios y aceiteros. Las asambleas de la Asociación Bancaria (en las dos últimas horas de atención al público el miércoles y el jueves, con un paro de 24 horas la semana próxima) son irritativas para el público en general. El gremio pide discutir el impacto de Ganancias o un eventual aumento de 40%.
El paro por tiempo indeterminado de la Federación de Aceiteros es una fuerte complicación para las exportaciones, dado que este sector es uno de los mayores aportantes de dólares al país. La semana pasada hubo una violenta protesta en la planta de Dreyfus, en General Lagos, al sur de Rosario, con destrucción de maquinarias y automóviles. El gremio pidió entre 42 y 48%, según las categorías, y los empresarios ofrecieron 24%, más una suma fija de $ 2000.
Los sectores empresarios aparecen como los mayores beneficiados por los cambios en el Impuesto a las Ganancias anunciados por el ministro de Economía, Axel Kicillof.
¿Por qué? Porque las modificaciones aliviarían las presiones por un mayor aumento salarial en las paritarias, con lo cual el impacto sobre la masa salarial de las compañías “empleo-intensivas” será menor.
¿Sirven los cambios anunciados para los trabajadores?
Los que no tributan Ganancias porque entre enero y agosto de 2013 tuvieron una remuneración bruta menor a los 15 mil pesos mensuales, seguirán exentos, cualquiera sea el incremento en las paritarias en marcha.
Los que ya pagaban Ganancias tendrán una menor carga en función de que se modificaron las escalas. Este beneficio alcanza sólo para quienes entre enero y agosto de 2013 cobraban entre 15 mil y 25 mil pesos en bruto (sin los descuentos de ley).
Los que ya pagaban Ganancias porque en ese período superaban los 25 mil pesos mensuales en bruto tendrán una incidencia mayor porque para este grupo no se modifican las escalas ni el mínimo no imponible. Por lo tanto, un trabajador puede pasar a una escala mayor por el impacto de la próxima suba salarial y porque se reducen las deducciones permitidas.
Además, no se soluciona la situación de los trabajadores independientes (autónomos).
Ver: Las inequidades en el Impuesto a las Ganancias se mantienen, según el análisis de José Luis Ceteri.