La industria no sale del letargo en que ingresó el año pasado, salvo los sectores que están vinculados a la industria automotriz, que vive un buen momento por las exportaciones a Brasil y porque los argentinos eligen al «auto» como una forma de colocar sus ahorros y no perder frente a la inflación. Además, la compra es atractiva vía el «dólar blue».
La actividad fabril sólo creció 0,1% en abril sobre marzo; igual porcentaje acumuló en el primer cuatrimestre sobre 2012. La creación de puestos de trabajo prácticamente se estancó desde 2010, en contrapartida al aumento de empleados públicos.
¿Qué está pasando?
Disparidad
▌ Ercole Felippa, titular de la Unión Industrial de Córdoba, reconoce que:
“La disparidad entre los sectores es muy notable, ya que los buenos promedios del sector metalmecánico disimulan la menor actividad de otros, como la industria alimenticia.”
▌ El informe de la consultora Orlando Ferreres le da la razón:
“El sector automotor se encuentra produciendo en niveles históricamente altos, las unidades producidas entre marzo y abril equivalen a los mejores meses de años anteriores.”
Inflación
Para los sectores que muestran números negativos, la inflación se lleva la competitividad cambiaria ganada entre 2003 y 2007, y también la rentabilidad. Esto pone en peligro el futuro del negocio.
Brasil
El «motor Brasil» se explica así: mientras que en 2003, adquiría el 29% de las exportaciones manufactureras argentinas, en 2012 esa cifra alcanzó el 42%, señaló la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba. La entidad advirtió también que la falta de competitividad hizo perder ventas al mercado chileno: en 2003 fue destino de 11% de las exportaciones industriales , en tanto que en 2012 esa participación se redujo al 6,1%. Cacec pidió al Gobierno eliminar retenciones a las exportaciones fabriles.
Empleo
▌Un comunicado del centro de estudios que firman Jorge Colina y Alejandra Torres advierte:
“Esto explica el gran magnetismo de la agrupación política juvenil generada en el interior del Gobierno (N.delE. La Cámpora), que es percibida por los jóvenes como el mecanismo más seguro y fácil de acceder a un empleo. Se trata de una ‘política’ que produce réditos políticos, pero de corto plazo, porque carece de sustentabilidad fiscal y profundiza la decadencia”
Entre 2010 y el segundo trimestre de 2012 (último dato disponible) sólo se habían agregado 45 mil nuevos puestos a los 536 mil creados entre 2003-2010, lo que revela un estancamiento en la creación de empleo industrial.