Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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La contundencia de la medida de fuerza, apoyada en los piquetes y bloqueos a los accesos a las principales ciudades, dejó ganancias y pérdidas en el terreno político. A la hora de saber quién ganó y quién perdió con la protesta del 20N, un primer análisis muestra…
estos resultados:
Fortaleció a Hugo Moyano, en alianza con la CTA y la Federación Agraria, como referente opositor. En sus reclamos, fue respaldado incluso por sectores que hasta hace poco cuestionaban su metodología. Cualquier aspirante presidencial deberá tenerlo en cuenta, como hizo en su momento Néstor Kirchner.
Debilitó al sindicalismo oficialista (CGT Balcarce), al no acompañar reclamos como los de Ganancias, asignaciones familiares y un pago extra a fin de año por la inflación. Más allá del ataque a los ómnibus en Córdoba, la dirigencia de UTA local se vio obligada a adherir ante el reclamo de los propios choferes. Manifestantes cuestionaron a la UEPC y al SEP.
Cristina Kirchner se recostó en La Cámpora y en sus funcionnarios para atacar con dureza al gremialismo opositor. No hubo trabajadores ni adherentes peronistas en el acto en San Pedro, Buenos Aires.
Contraataque oficialista. El Gobierno fortalecerá su alianza con un sector del empresariado entre lunes y martes próximos, en la conferencia de la UIA, en la que Cristina Kirchner se mostrará junto a Dilma Rousseff.
7D. Es la gran apuesta del kirchnerismo para revertir «la pérdida de la calle» que supusieron el 8N y el paro de ayer.