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Por Sergio Mabres. Entre los temas más abordados en las charlas de tecnología se encuentran la realidad virtual (RV) y, su hermana, la realidad aumentada (RA). Por caso, ayer más de 800 personas se dieron cita en el Congreso «Argentina Mira el Futuro» para escuchar sobre éstas y otras tendencias que impactarán en la región.
El evento, realizado con el apoyo de los ministerios de Ciencia y Tecnología de la provincia de Córdoba y de la Nación, tuvo lugar en Centro de Congresos y Convenciones del Quórum Hotel. Allí, expertos en las tecnologías exponenciales de Singularity University disertaron sobre el futuro y el impacto de la innovación en los grandes retos de la humanidad.
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Por el momento, la realidad virtual ha sido más utilizada en los videojuegos, en los que la inmersión brinda una experiencia única. Sin embargo, su alcance se está expandiendo a otras industrias, medios y negocios.
Por otro lado, la realidad aumentada permite observar el mundo virtual sobreimpreso en el mundo real. En la pantalla de un teléfono puede combinar la realidad filmada por la cámara junto a otros elementos agregados por una aplicación móvil (app). A diferencia de la realidad virtual, no requiere de un cabezal.
Si bien la realidad aumentada aún tiene pocas apps en su haber, la lista de promesas es larga: ayuda para cirujanos, mecánicos, técnicos que pueden visualizar, gracias a esta tecnología, fechas y diagramas sobre el objeto real, con la indicación de cómo realizar una tarea. En el siguiente video de The Verge, se puede apreciar un ejemplo de la realidad aumentada aplicada al manual de un auto Hyundai.
Aaron Frank, escritor, conferencista y miembro de Singularity University, se mostró entusiasmado por la aceleración del cambio que producirán las tecnologías emergentes en los negocios, la sociedad y la cultura. En especial, el impacto de la experiencias en el mundo de la realidad virtual y la realidad aumentada.
.@aarondfrank finalizando su gran charla sobre realidad virtual y realidad aumentada en el evento de @Singularity_BA en Córdoba pic.twitter.com/bTpzU7ApNJ
— SingularityBA (@Singularity_BA) 29 de noviembre de 2016
Como en todas las tecnologías, «en un lado del ring» hay tecnófilos profetizando saltos exponenciales en su aplicación; mientras que -en el otro extremo- hay tecnofóbicos que predicen su fracaso (como si este caso, fuese similar al de los televisores de 3D).
Lo cierto es que la verdad suele estar en alguna posición intermedia entre ambos extremos.
Si bien la realidad virtual y la realidad aumentada están compuestas por elementos que crecen en forma exponencial, como la memoria o la potencia de los procesadores; otros, no crecen al mismo nivel.
Sin embargo, hay que reconocer la capacidad de generar un abanico de experiencias que antes eran impensadas. Esto genera nuevas oportunidades, no sólo en el mundo del entretenimiento, la producción y la educación, sino también en la creación de empresas especializadas. Incluso en nuevos segmentos de mercados.
Si bien la oportunidad de la RV/RA en educación a distancia es buena, no es radicalmente superior a la del video. De todas maneras, parece tener una clara ventaja en la experimentación posterior de los eventos, desde diferentes ángulos. Se advierte aquí una potencial oportunidad comercial para las empresas que se dediquen a grabar y comercialicen estos espectáculos de RV social.
La adopción masiva de la realidad aumentada y de la realidad virtual para la distribución de contenidos estará supeditada, entre otros factores, a su facilidad de uso. Si los cabezales son incómodos, difíciles de usar o marean al usarlos, entonces esta tecnología va a pasar sin pena ni gloria, y será usada sólo por un puñado de experimentadores.
Por el contrario, si la tecnología es fácil de usar, hay comandos verbales, facilidad para moverse en el mundo virtual, los cabezales son cómodos, las baterías duran mucho y la experiencia no marea, estamos frente a un cambio de paradigma del que seguiremos hablando en los próximos años.
Contrario a lo que podría pensar el lector, mis cinco centavos van para la Inteligencia Artificial que, a mi criterio, tiene muchas más probabilidades (que la RV/RA) de convertirse en el próximo gran cambio de paradigma.