Por Daniel Scandizzo. El mundo se apresta a celebrar San Valentín o el día de los enamorados. Las cifras que se gastarán en regalos, homenajes y agasajos sorprenden, y crecen año tras año. Aquí una interesante comparación de los gastos en otros países y sobre la conducta de los argentinos.

Las reservas de nuestro Banco Central suman algo más de 31.000 millones de dólares. Ésa es la cifra que procuran defender como superheroes funcionarios del Gobierno. Pensemos, como acto de imaginación, que en 24 horas la mitad desaparece, se hace polvo. Una tragedia económica.

Pues bien, 14.000 millones de dólares es lo que gastan en promedio los consumidores norteamericanos para el Día de San Valentín (o el día de los enamorados). ¿Otra comparación? Tres veces el presupuesto previsto para 2015 de la Provincia de Córdoba. Y es sólo un festejo. Y sólo una fecha.

Pero dejemos las frías cifras del dinero. El amor (y la economía) también tiene su relato real: 190 millones de rosas, 180 millones de tarjetas alusivas, 36 millones de cajas de dulces y bombones. El comercio le rinde pleitesía al santo.

Indaguemos algo más: el 85% de las tarjetas son compradas y enviadas por mujeres. A la inversa, el 73% de las flores son obsequiadas por hombres y un dato interesante: el 14% de las damas que compran una tarjeta y se las envía a sí misma. Las evidencias muestran un sentimiento de generosidad más amplio en la mujer, ya que no sólo homenajea a su pareja, sino también a sus hijos, amigos y mascotas.

Locales gastronómicos, florerías, joyerías, panaderías, chocolaterías, tiendas y sex shops son los sectores que marcan el ritmo en esta efemérides. Pero este año debemos sumar uno más: el cine. El anunciado estreno de 50 sombras de Grey, que seguramente batirá récords de taquillas y el “fuego” que promete, impulsará más regalos y “festejos”.

Quienes decidan sumarse a la celebración en Estados Unidos, consumen en promedio 116 dólares, mientras que en Gran Bretaña destinan 76 libras. Traducidos a nuestra devaluada moneda son entre 1.500 y 2.000 pesos. Y este dato sobresale: el 60% de los consumidores en Estados Unidos realiza algún gasto vinculado al festejo.

En Argentina, ¿qué?

Se estima que sólo el 3% de los argentinos (1,2 millones) participa del festejo, pero atención, la tendencia es en franco aumento: en 2007, lo hacía nada más que el 0,7% (sólo un cuarto de los que celebran ahora). Oportunidad latente que debe ser ayudada: entre los sitios web de los 10 centros comerciales más importante de Buenos Aires y el interior, sólo dos hacían alguna referencia comercial concreta al santo de los enamorados.

San Valentín, ¿amor o consumismo? Honestamente, la respuesta no suma demasiado. Prefiero pensar que consumimos por amor.

Fuentes consultadas: Statistic Brain, Ezbob, La Nación.

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