Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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Por Juan Turello. En mi columna dominical en La Voz del Interior, señalo que el proclamado congelamiento de precios tiene grietas y predomina la incertidumbre sobre qué hará el Gobierno.
“Los empresarios están desesperados”…
… resume un analista que conoce la incertidumbre que predomina en el campo de los negocios. Las familias, a su vez, reciben señales contradictorias sobre el proclamado acuerdo de precios, que tiene grietas en su cumplimiento en varias provincias.
Hacia adelante, la sensación que predomina no es buena. De hecho, la encuesta de la UCA-TNS Gallup, que incluyó 1.013 consultas en 26 localidades de la Argentina, reveló que para el 37 por ciento de los entrevistados la situación económica permanecerá igual, en tanto, para el 29 por ciento, empeorará. Para el 77 por ciento, los precios seguirán aumentando.
Aunque en Córdoba los valores de los alimentos no variaron en la última semana, según el relevamiento de La Voz del Interior, en grandes cadenas de Santa Fe y Mendoza se denunciaron aumentos. Es una incógnita qué impacto tendrá en los costos la decisión de YPF de seguir con su propia pauta de aumento en los combustibles. La empresa número uno produce el 35 por ciento de los derivados del petróleo y gas que se consume en el país. El campo deberá absorber el mayor costo del gasoil en plena cosecha gruesa de granos, en tanto, no se sabe cómo reaccionarán el transporte de cargas, la industria y los puntos de venta minorista. “Sin contar el próximo aumento en la paritaria, ¿cómo puedo entregar las gaseosas a los mismos precios si enfrento un aumento en los costos y en los fletes?”, se preguntaba ante este diario un industrial de la alimentación.
Los supermercados ya saben que la actual política de precios se mantendrá otros 60 días, o más.
¿Cuándo termina el congelamiento? “Esto sigue hasta que el Gobierno tenga en claro cuánto es la cosecha de soja y con cuánta plata se va a encontrar”, opina el economista Jorge Ingaramo.
Ingaramo afirma que “desde el congelamiento (el 31 de octubre de 2011) se perdieron reservas por 21.920 millones de dólares; por compromisos de la deuda del Tesoro se fueron 7.759 millones y el resto, por fuga de capitales”. El economista proyecta una cosecha de soja en torno de los 50 millones de toneladas, de las cuales Córdoba aportaría 12,5 millones.
Néstor Roulet, ex vicepresidente de CRA (en Twitter: @NestorRoulet), advierte que los números no son favorables para el productor que arrendó campos y pueden ser levemente positivos para el que sembró en su propio establecimiento. “El 56 por ciento de la soja de la próxima campaña ya está comprometida por los costos y las pérdidas del ciclo anterior”, advierte para moderar las expectativas que trazadas sobre el consumo del hombre de campo.
La principal incertidumbre sigue siendo la falta de señales claras sobre qué hará el Gobierno en materia de política económica.