Por Juan Turello. La formación economicista de Javier Milei le impide ver la necesidad de que las medidas tengan el suficiente respaldo político para que sean perdurables, y no se conviertan en variables que cambian cada cuatro años, señala mi nota en La Voz.
O quizá el Presidente prefiera el estilo crítico de la política -por ahora, con apoyo mayoritario de la sociedad-, porque la dirigencia partidaria está en deuda con la solución de los múltiples problemas que enfrenta la sociedad. Repasemos qué esta pasando.