Mientras el Gobierno prepara su ofensiva para el 7D (7 de diciembre), las dos centrales obreras más activas –la CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli– ratificaron el paro del 20N, aunque todavía se discuten sus alcances y si habrá movilización hacia la Plaza de Mayo. Sería apoyado por la Federación Agraria Argentina.
La huelga será otro test social para el gobierno de Cristina Kirchner.
La protesta tendrá como ejes la reciente ley de ART, que los gremios opositores califican como «pro-patronal», y el reclamo por la actualización del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. Este planteo es compartido por la CGT oficialista de Antonio Caló, que también anticipó medidas de fuerza si no hay una respuesta favorable al pedido de fondos para las obras sociales.
A todo esto, durante el fin de semana continuaron los análisis sobre qué dejaron las multitudinarias manifestaciones del 8N en las principales ciudades del país. Las diversas encuestas publicadas reflejaron que entre 30 y 40% de los que apoyaron el cacerolazo se encuentran votantes de Cristina Kirchner (en Twitter: @CFKArgentina) hace poco más de un año. También crece la imagen negativa de la Presidenta aún entre los propios oficialistas.
Otro dato clave es que la sociedad cree que ni el oficialismo ni la oposición responderán a los reclamos de los indignados que salieron a las calles. Este grupo social se convierte en una encrucijada política. ¿Quién los liderará? «El que se ocupe de sus problemas y los solucione», dijo el viernes último el sociólogo Pedro León Almeida al programa radial Bipolares (96.1).
Lo que vendrá: el jueves 15/11, Martín Sabbatella, titular de la Administración Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), informará sobre las 20 empresas mediáticas que exceden lo permitido en porcentaje de mercado (35 por ciento) o en cantidad de licencias (10 de aire o 24 de cable), de acuerdo con la interpretación oficial de la ley de medios.
Más allá de la generalidad, la estrategia oficial apunta a desmembrar al Grupo Clarín en cuanto a las licencias de televisión, radios y cables en todo el país.