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La palabra «nube» o la expresión «en la nube» son cada vez más frecuentes en noticias de tecnología, pero pocos saben qué significa y cómo funciona; incluso siendo usuarios.
También conocido por sus siglas en inglés como «cloud computing«, «la nube» es un concepto para hacer referencia a los servicios que consumimos a través de Internet, los cuales pueden estar relacionados a:
> El almacenamiento de los archivos en la web (ej. Dropbox, Flickr).
> El uso de programas de software desde la Web (ej. Google Drive o Google Apps, Office 365).
> El uso de plataformas tecnológicas o consumo de infraestructura tecnológica desde la Web.
Pero no nos volvamos muy técnicos, mejor veamos el siguiente video explicativo desarollado por CNN para entender un poco más:
Lo cierto es que «la nube» es una realidad que va ganando fuerza porque el almacenamiento físico local (en nuestras PC, discos duros y otros dispositivos/equipos) está siendo sustituido por el guardado etéreo de los archivos; allá, lejos, muy lejos, en algún lugar que desconocemos pero que, en el momento en que lo decidamos, podemos acceder a ellos.
Quizá por eso la nube es la alegoría ideal: en nuestra mente, los documentos están suspendidos en algún sitio remoto. La realidad es que guardar algo en la nube implica solamente tenerlo en otra parte, probablemente, en un servidor remoto dentro de un gran centro de datos (data center). Para nosotros, es de lo más práctico: nos olvidamos de cargar con soportes físicos, con almacenar en el ordenador o con tener innumerables memorias USB. Sólo requerimos de una conexión a Internet y listo, la fantasía se vuelve realidad: los archivos son omnipresentes siempre y cuando podamos colgarnos a la Web.
A pesar de los beneficios que representa todo lo anterior -en especial para aquellas personas que utilizan dispositivos: smartphones, tablets y PC- el principal desafío de las empresas que ofrecen estos servicios es garantizar la seguridad y privacidad de la información que los usuarios administran y suben a «la nube». De hecho, hay debates vinculados a la propiedad intelectual.
En próximos artículos ampliaremos más detalles sobre los tipos de nubes, y cuáles son sus ventajas y desventajas.