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Por Juan Turello. José Lutri hace tres décadas que trabaja en Fiat; su compañero Carlos Fant se inició hace 38, cuando la empresa era Fiat Concord. Aunque ya han pasado por muchos altibajos, se entusiasman tras escuchar a Mauricio Macri y el anuncio de una inversión de 500 millones de dólares para fabricar un nuevo modelo en Ferreyra. “Tenemos buenas expectativas”, dicen con sus canas a cuestas. ¿Es así? Repasemos.
Mi nota dominical en La Voz del Interior señala que tales expresiones pueden ser parte del diagnóstico que sentencia que “a Macri le va mejor en la calle que en los medios de comunicación”.
Los datos no son buenos. Las ventas minoristas cayeron 5% en marzo, según la federación comercial (FEDECOM). Los 20 rubros relevados mostraron desempeño contractivo, con fuertes caídas en electrodomésticos (7,8%) y en materiales de la construcción (6,8%). No se gasta en equipar el hogar ni en construir.
Las terminales automotrices invertirán en Córdoba 1.150 millones de dólares desde 2017 para producir un nuevo modelo sedán y tres pick ups, pero, por ahora, hay suspensiones rotativas en tres plantas.
Las empresas metalmecánicas trabajan a la mitad de su capacidad instalada, por lo que les pedirán ayuda a los gobiernos de Córdoba y de la Nación. “No tenemos las espaldas financieras de las terminales para sortear el mal momento”, advierten.
El “mientras tanto” es uno de los grandes desafíos de la gestión de Macri, que prepara anuncios para los sectores más sumergidos de la pirámide: la Asignación Universal por Hijo (AUH), de 966 pesos, llegaría también a los monotributistas de las categorías más bajas, entre otros, y se reducirá el IVA-alimentos para unos ocho millones de argentinos.
Economistas coinciden: abril será el peor mes de inflación por las tarifas y mayo, el peor en caída de la actividad. El consumo se recuperaría desde junio.
¿Alcanza? No para los asalariados que aún no recibieron los aumentos de la paritaria ni para los pasivos, con haberes insuficientes. La suba en alimentos, impuestos, tarifas y servicios los ha colocado al límite de la subsistencia. El consumo, como lo relevó FEDECOM, cayó en todos los rubros.
¿El escándalo político por los Panamá Papers y la corrupción del kirchnerismo afectarán a las inversiones anunciadas y golpearán a la economía? El politólogo Sergio Berensztein opina: “En la medida que haya una Justicia independiente e imparcial (en el tratamiento de ambos casos), no afectará a la economía. Por el contrario, podría ser una buena señal de seguridad jurídica la actuación de una Justicia independiente. Hay una cuestión de reputación para el Presidente, que quedaría salvada en la medida que se aclare”, concluyó.
Los economistas coinciden: abril será el peor mes en inflación por el retoque de tarifas, y mayo, el peor en la caída de la actividad. Desde junio, los nuevos salarios y un dólar quieto ayudarán a reactivar el consumo, con una inflación moderada por ofertas y promociones.
Las expectativas positivas de José y Carlos se pondrán a prueba, así como la confianza en la gestión de Macri.