Las trabas a las operaciones en dólares empujaron una caída de 3,2% en la construcción en 2012, según cifras oficiales del INDEC.
La baja está ligada fundamentalmente a la traba para operar en moneda estadounidense, en especial en las ventas que se realizan en la Capital Federal y el conurbano bonaerense, que resisten la pesificación de las operaciones como obligó el gobierno de Cristina Kirchner. «El que vende quiere dólares para cuidar el valor de su dinero, y éstos no se consiguen», reveló un desarrollista particular, al tiempo que reconoció que la disparada del dólar «blue» –ayer cerró a 7,92 pesos- genera inquietud y, por efecto, congela la operaciones.
En Córdoba, la adaptación al uso de pesos fue más rápida y si bien cayeron las transacciones de departamentos y viviendas nuevas, se incrementaron las relacionadas con el pago en cuotas y las ventas de terrenos, según el informe de CEDUC de noviembre.
«Todo el mundo tiene dólares», dijo a este sitio un constructor privado, quien confirmó que las bruscas oscilaciones del dólar «blue» desde mediados de diciembre, paralizaron al sector y hay pocos proyectos nuevos en marcha. «Sólo se terminan los que se empezaron, por una cuestión de costos», graficó.
Por ahora, los billetes verdes y el ahorro de algunas familias se destinan a mejoras en las viviendas, como una forma de agregarle valor a la propiedad. En cambio, los permisos de edificación para los 42 municipios principales del país retrocedieron 9,2% en 2012, configurando la peor baja de la construcción en la última década.
Otro dato curioso al informe oficial es que si la industria y la construcción retrocedieron en 2012, ¿dónde se originaron lo nuevos empleos que permitieron reducir la desocupación del 7,6 al 6,9%, como anunció el lunes último la Presidenta (en Twitter: @CFKArgentina).
Sin conocer las cifras en detalle, los especialistas arriesgan que la gente podría haber abandonado la búsqueda de trabajo o bien que los nuevos puestos laborales se generaron en el Estado, en especial en las administraciones provinciales.