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Por Juan Turello. La gestión de Mauricio Macri está por cumplir un año. Entre las realizaciones anunciadas y que no se concretaron está la de la “lluvia de inversiones”.
Sobre el tema, Jorge Brito, vicepresidente de la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA) y titular de Banco Macro, señaló su optimismo de que la inversión “va a crecer en 2017 entre 6 y 7 puntos por encima de la de este año. No es suficiente, pero es bueno. No habrá grandes inversiones, pero sí hay que pensar en que haya una Pyme que todos los días invierta 10 millones. Las grandes inversiones vendrán luego de la elección legislativa, donde la relación de fuerzas variará en 10 más o en 10 menos de legisladores de cada partido”.
Un repaso de las principales definiciones de un hombre clave de la banca argentina.
Brito, junto a miembros de la cúpula de la entidad y de Córdoba, encabezada por el gerente regional Eduardo Celani, presidió en Villa María el agasajo a los clientes de Banco Macro, con motivo del cierre del año.
Entre los anuncios se contó el de que Banco Macro adquirió un predio en Villa Carlos Paz para inaugurar allí una de las principales sucursales, que responderá al crecimiento edilicio y en los negocios de esa ciudad.
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La actividad fue organizada por el área de Relaciones Institucionales, que encabeza Milagro Medrano. Se efectuó en Villa María (“queremos apoyar la actividad en el interior”, explicaron), con la presencia de autoridades y empresarios, entre quienes se contaron Euclides Bugliotti (Grupo Dinosaurio) y Roxana Negrini (Agrometal), entre otros.
Distendido, con mate amargo en mano, Brito habló con Turello.com.ar , minutos antes de recibir a los invitados. Éstas fueron sus principales definiciones:
-¿Cómo está hoy la economía?
-Me gusta responder a esta pregunta diciendo dónde estábamos el 10 de diciembre. El país se parecía al dueño de un auto que, atado con alambre, hacía un tremendo esfuerzo para llegar al taller. Lo que se hizo fue lo necesario para volver a crecer. Había que hacer esas correcciones, que, por supuesto, tienen un costo. Los grandes desajustes de la economía se han encaminado. En diciembre de 2015, para endeudarse había que pagar 14% en dólares; antes de la elección de Estados Unidos, logramos colocar deuda al 6,75%.
-¿El balance es positivo?
-Es positivo, aunque todavía tenemos un déficit importante. Hay que ir pensando en reducirlo porque el año que viene la Argentina va a necesitar financiamiento por unos 35 mil millones de dólares.
-¿El frente externo cambió a partir del triunfo de Donald Trump?
–El escenario cambió a raíz del triunfo de Trump, pero adhiero al teorema de Baglini… a medida de que Trump se acerque a la Presidencia (asume el 20 de enero), vamos a escuchar un discurso que no habíamos escuchado antes. Creo que vamos hacia un Estados Unidos más proteccionista, pero no creo que Nike haga zapatillas en Estados Unidos, por el costo de la mano de obra. N. de la R: en la actualidad, Nike y otras grandes empresas norteamericanas fabrican sus productos en China y en otros países del sudeste asiático.
-¿Qué proyecciones maneja para 2017?
–La inflación va a estar en torno del 20%. Hay que trabajar en la corrección del déficit fiscal. La tasa de referencia de EE.UU. era de 1,8%; en los últimos días cerró a 2,3% y podría llegar a 2,5%. El déficit de EE.UU. va a ser más grande, por lo que tendría que pagar más para financiarlo, pero sucede que en el mundo hay mucha disponibilidad financiera.
-¿Por qué no se produjo el «boom» de inversiones en el país?
–La inversión va a crecer en 2017 entre 6 y 7 puntos por encima de la de este año. No es suficiente, pero es bueno. No habrá grandes inversiones, pero sí hay que pensar en que todos los días haya una Pyme que invierta 10 millones. Las grandes inversiones vendrán luego de la elección legislativa, donde la relación de fuerzas variará en 10 más o en 10 menos de legisladores de cada partido.