Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
Suscribite al canal de Los Turello.
Por Juan Turello. Junto con las mieles de la victoria, los candidatos electos en Córdoba reciben también los desafíos que acumula uno de los territorios con mayores potencialidades del país. La provincia goza de una economía diversificada, pero este año el mayor aporte provendrá del campo, que está levantando una cosecha récord de más 37 millones de toneladas. Esa cosecha aportaría un extra de más de 1.650 millones de dólares en relación con la del ciclo pasado. ¿Cómo están la industria y el comercio?
1. Campo. Pese a la baja del precio internacional de la soja –a niveles de una década atrás-, los mayores rindes significarán un crecimiento de 3,6% en el producto bruto geográfico (PBG), explica el economista Juan Manuel Garzón.
Las buenas noticias incluyen una recuperación de la producción láctea luego de la caída en el primer trimestre, y excelentes reservas en forrajes, que ahora podrían ser exportados a países árabes.
Córdoba faenó en 2018 un millón de cerdos, una cifra similar a la del ganado bovino, afirma Daniel Urcía de la Asociación de Frigoríficos e Industriales de la Carne (AFIC). La provincia jugará un rol clave en la apertura del mercado chino a la carne de cerdo argentina. Es una de las noticias más impactantes para la agroindustria.
“Un kilo de carne en China vale más que un kilo de piezas del Audi”, suele bromear Luis Miguel Etchevehere, secretario de Agroindustria de la Nación. “La agroindustria tiene la cabeza fuera del agua”, completa Ercole Felippa, dirigente del sector lácteo y vicepresidente de la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
¿Todo esto alcanza para la recuperación de la economía cordobesa? No, pero constituye un fuerte empujón. Las ventas de maquinaria agrícola se incrementaron 43% en el primer trimestre en comparación con la suba del 20% registrada en 2018, señala la Asociación de Fabricantes de Maquinarias Agrícolas de Córdoba (Afamac).
2. Turismo. Otro de los pilares del crecimiento podría ser el turismo, el cual necesita profesionalizar aún más la oferta y mejorar la calidad de los servicios.
3. Industria automotor. Por contrapartida, una de las patas flacas es el fuerte parate registrado en las terminales automotrices, con su impacto negativo en los proveedores autopartistas. El panorama se agrava por la falta de vigor de la demanda brasileña. Numerosas fábricas de primera línea están al borde de la inactividad, pese a las millonarias inversiones realizadas para levantar el polo de pick ups en el complejo de Santa Isabel.
4. Construcción. La otra incógnita es la construcción, que tuvo meses espectaculares por la finalización de los grandes proyectos de obra pública, pero es incierto qué sucederá en los próximos meses.
5. Cuentas públicas. También se desconoce el estado real de las cuentas públicas de la Provincia y del municipio capitalino. El martes próximo, Osvaldo Giordano, ministro de Finanzas, dará una pista sobre ello.
6. Pobreza y más. El desempleo pudo haber trepado a los dos dígitos desde el 9,2% registrado en 2018 (67 mil cordobeses) por las caídas en la industria y en comercio, cuyas ventas retrocedieron 13,5% en el primer cuatrimestre, con 15 meses consecutivos a la baja, advierte la Cámara de Comercio de Córdoba.
A fines del año pasado, más de uno de cada tres habitantes del Gran Córdoba (36,5%) se hallaba sumergido en la pobreza. De ese total, uno de cada cinco era indigente, es decir, no alcanzaba a ingerir una dieta mínima de subsistencia.
Las políticas de lucha contra la pobreza, el narcotráfico y la inseguridad exigirán una coordinación de los tres niveles del Estado.
Más allá que Juan Schiaretti y Martín Llaryora pertenecen al mismo signo político, la delicada situación social y económica demandará el trabajo en conjunto para enfrentar los desafíos.
A lo largo de más de 35 años de democracia, en muy contadas ocasiones se produjo esa tarea mancomunada. La pertenencia a diferentes signos políticos entre el gobernador y el intendente de Córdoba, o bien la rivalidad entre ambos pese a la militancia en una misma agrupación, tuvo un alto costo para el desarrollo y para las respuestas que necesita la sociedad.
Cordobeses, a las cosas, debiera ser el eslogan después de las elecciones.