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Cristina Kirchner arremetió contra la titular del FMI, Christine Lagarde, que había amenazado con sacarle «tarjeta roja» a la Argentina si el 17 de diciembre no presentaba estadísticas confiables. En forma simultánea, el INDEC informaba que la pobreza bajó en relación a 2011.
En Nueva York…
… donde asiste a la reunión anual de la ONU, la Presidenta aprovechó el ataque del Fondo Monetario Internacional para responderle: «Esto no es un partido de fútbol, esto es la crisis económica más grave que se tenga memoria desde la década del ’30». Más adelante, insistió: «Mi país no es un cuadro de fútbol, sino un país soberano y no va a aceptar ninguna amenaza».
El FMI reclama estadísticas creíbles, al igual que economistas privados de la Argentina. El tema de los datos increíbles del INDEC fue uno de los motivos del «cacerolazo» del 13 de septiembre último (13-S). Ayer, incluso, hubo una protesta similar frente al hotel donde se hospedaba la Presidenta en Nueva York. Hoy hablará en la Universidad de Georgetown, en Washington, y mañana dará una cátedra en la Universidad de Harvard. El foro en Internet de la prestigiosa universidad de Cambridge (Massachusetts) se ha visto convulsionado, con opiniones a favor y en contra.
Ayer, el INDEC ofreció otros de esos datos increíbles: dijo que la pobreza afectaba sólo al 6,5% de la población en el segundo trimestre. En igual período de 2011 alcanzaba al 8,3%. Los economistas no se explican cómo pudo bajar la pobreza cuando un día antes el organismo había reconocido que la economía se había estancado entre abril y junio, incluso había retrocedido 0,8% en relación al primer trimestre del año.
Los datos más polémicos son los que una persona puede vivir con 6 pesos diarios y no caer en la indigencia, mientras que con 13 pesos por día se salva de ser considerada pobre.