La «marea roja» que sacude a Venezuela y el impacto por la muerte de Hugo Chávez, ¿beneficiarán al kirchnerismo en las próximas elecciones y fortalecerá el «modelo» que defiende Cristina Kirchner?
Por lo pronto, el culto a la personalidad y a sus políticas -que elevarán a Chávez a la categoría de mito- no concluirá hoy como estaba previsto, ya que el cuerpo será exhibido 7 días más y luego embalsamado, según anunció ayer el vicepresidente Nicolás Maduro, sucesor puesto al frente de la República Bolivariana. El paso del féretro por las calles de Caracas fue impresionante (foto).
La Presidenta (@CFKArgentina) sintió «una infinita tristeza» por la muerte de su amigo y gestor, junto a Néstor Kirchner, del rechazo al Acuerdo de Libre Comercio (Alca), durante la cumbre americana realizada en Mar del Plata. «Alca, Alca, Alcarajo», fue la famosa frase que identificó a la cumbre paralela a la de los jefes de Estado. «El mejor amigo que tuvo la Argentina cuando todos le soltaron la mano. Le guste a quien le guste», dijo ayer en su cuenta de Twitter.
Cristina Kirchner dispuso tres días de duelo y se trasladó en la noche del martes a Caracas, donde permaneció el miércoles y finalmente, ayer por la tarde emprendió el regreso. ¿Lo hizo para evitar encontrarse con el líder iraní Mahmud Ahmadineyad, con cuyo gobierno firmó el acuerdo por la AMIA? ¿No quiso irritar a Estados Unidos y a la comunidad judía con una foto con este polémico personaje, que asistirá hoy al funeral oficial?
Ya en la Argentina, la Presidenta tratará de aprovechar la ola de simpatía que despertó Hugo Chávez en las últimas horas y plantear un discurso de «independencia» frente a las grandes potencias y organismos internacionales (como había hecho el líder bolivariano en vida), según especulaban anoche observadores políticos consultados por esta página.
Es posible también que Cristina Kirchner sostenga varias de las políticas económicas que impuso Chávez en Venezuela, aunque con resultados dudosos. El ex presidente pudo sostener algunas políticas (control de la producción, estatizaciones) en base a los ingresos por las ventas de petróleo. El precio del barril cerró ayer a 91,56 dólares. Argentina, en cambio, registró un déficit en la balanza energética de U$S 2.500 millones en 2012, según el informe del CPCE de Córdoba (@CPCECordoba).
El kirchnerismo mantendría el control de precios y del mercado cambiario hasta después de las elecciones del 27 de octubre próximo. En forma paralela, en fuentes políticas y económicas se especula con un adelantamiento de los comicios a agosto para aprovechar los beneficios que produce en el ánimo social el congelamiento de precios.