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Por Daniel Scandizzo. El interrogante invita a ensayar una, dos o diez respuestas. Para desarrollarlas me sitúo en una pequeña y mediana empresa [PyME] industrial o de servicios. Estos tipos de organizaciones han afrontado un 2015 que amagó; un 2016 en reversa y un 2017 que empuja «despacito», como canta Luis Fonzi, sin motor aún.
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Capitanear el barco de una empresa nunca es tarea sencilla. Shakespeare decía que cuando el mar está quieto todos los barcos muestran maestría para navegar, pero en los negocios las aguas calmas son un capítulo de ficción.
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Quiero saber, entonces, antes de levar anclas cómo está el mar. Nada mejor para ello, que leer a los economistas citados en algunos medios nacionales. Entre ellos, Miguel Ángel Broda, Miguel Bein y Javier Milei.
El Modelo, El Terreno y La Trampa
Las Inversiones y La Expansión
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A esta altura tengo dos opciones: corto mi columna acá y dejo que el lector redacte el párrafo de cierre o me arriesgo con un menú de cuatro indicaciones de vestuario para el denodado empresario PyME. No lo pienso demasiado y voy por la segunda alternativa.
1] Respeto muchísimo a los economistas citados, pero sus opiniones no lo van a rescatar de la marea. En consecuencia, invierta más tiempo leyendo sobre herramientas que le permitan mejorar la gestión de su empresa. Conviértase en un experto en management, no en economía.
«Conviértase en un experto en management, no en economía»
2] Repase la misión de su empresa, seguramente en alguna pared estará enmarcada. Luego, pregúntese: ¿cuál es el propósito de mi empresa? ¿Por qué hacemos lo que hacemos? Ni se le ocurra responder que hace lo que hace por dinero. Ése es el resultado. Si en la respuesta no aparece el cliente, comience a preocuparse.
3] Luego pregúntese: ¿Qué quieren o qué necesitan mis clientes? Y luego: ¿Le estamos dando lo que ellos quieren o necesitan?
4] Finalmente, pregúntese si logra hacer más fácil la vida de sus clientes con la propuesta de su negocio.
Broda, Bein, Milei pueden tener razón, pero usted no puede hacer mucho por la “macroeconomía”, en cambio sí puede incorporar destrezas de gestión y construir un equipo para transitar la incertidumbre.