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Si hay un tema aburrido para la opinión pública es el tratamiento del Presupuesto 2014 para los distintos niveles de gobierno. Sin embargo, el cálculo nacional, por caso, es clave para saber qué sucederá en las provincias, con los impuestos y la obra pública entre otras señales.
Los contenidos más polémicos del proyecto que sería aprobado el próximo miércoles por la Cámara de Diputados de la Nación.
Con relación al impuesto al cheque, para el contribuyente no cambia nada: seguirá siendo de 0,6% por cada depósito o extracción de una cuenta bancaria. En total, 1,2% sobre débitos y créditos bancarios.
Para el gobierno de Cristina Kirchner será una batalla política, ya que la oposición exige para su prórroga por dos años una mayoría especial en Diputados (129 votos), que el oficialismo no tendría por ahora.Debe hacer concesiones a partidos provinciales, por caso ya habría negociado con los hermanos Rodríguez Saá el apoyo de San Luis a cambio de disponer un aumento de 111% en la obra pública en esa provincia para 2014. Por contrapartida, el incremento para Córdoba de obra pública nacional sería menor al 2,1%.
Es el tema que más preocupa al interior. El año que viene las provincias deben comenzar a cancelar una deuda total que alcanza a 65.000 millones de pesos, que tuvo un período de gracia de tres años (se renegoció en 2010). El interior deberá sobrevivir con recaudación propia y la coparticipación, ya que para endeudarse depende de la autorización de la Nación (por caso se la concedió ahora a Daniel Scioli, quien se puso al frente de la campaña en Buenos Aires).
El Gobierno nacional se financia a través de utilidades ficticias del Banco Central y de la ANSES, a los que les coloca títulos en dólares. Este auxilio al Tesoro nacional no se reparte a las provincias.
La asfixia al interior se produce en momentos en que las economías regionales sufren un fuerte golpe por la pérdida de competitividad (inflación alta con dólar oficial subvaluado). ■
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