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Por Claudio Fantini. ¿Qué pone en evidencia la masacre perpetrada en Ankara, Turquía, si -como sostiene el gobierno- fue perpetrada por ISIS (Estado Islámico)? Que el presidente Reccep Tayyip Erdogán y el primer ministro Ahmed Davutoglu se equivocan al sostener que la prioridad en Siria es la caída del régimen alauita.
No habían terminado de contar las 128 muertos que dejaron las dos bombas detonadas contra una marcha por la paz con los kurdos, cuando el gobierno turco lanzó su dedo acusador contra la demencial milicia sunita que estableció un “califato” en parte de Irak y Siria.
Los yihadistas del autoproclamado “califa” Abu Bakr al Bagdadí también están guerra contra los kurdos en el norte iraquí y en el noreste sirio. Allí, la fuerza que más resistencia les opuso no fueron los ejércitos de Siria e Irak, sino los “peshmergas” (milicianos kurdos) y los habitantes kurdos de ciudades como Kobane, donde los yihadistas encontraron una resistencia que evoca a la de Stalingrado contra los nazis.
La mayor resistencia contra la Yihad provino de los milicianos kurdos en el norte de Iraq y Siria, y en Kobane, que evoca a la de Stalingrado contra los nazis.
El gobierno de Turquía y el ISIS tienen como enemigo común a los kurdos. Por eso, y por priorizar la caída del régimen alauita en Siria, es que el presidente Erdogán no movió los tanques de la frontera para salvar a los habitantes de Kobane, la ciudad de donde huía la familia del niño cuyo cadáver apareció en una playa de Turquía.
Por cierto, es imposible, de momento, descartar que a la masacre en Ankara, capital turca situada en el corazón de Anatolia Central (o sea muy lejos de las fronteras siria e iraquí), no haya sido perpetrada por ISIS sino por otro terrorismo.
En Turquía, hay grupos ultranacionalistas que coinciden con el gobierno en el desprecio a los kurdos y a los pacifistas, mientras que la protesta atacada fue organizada por el pro-kurdo Partido Democrático Popular, por la izquierda laica y pacifista, y por sindicatos opositores a Reccep Erdogán. Pero si, como dicen Erdogán y el primer ministro, fue un brazo de ISIS el que cometió la masacre, entonces el gobierno turco deberá plantearse el orden de prioridades que hasta ahora ha mantenido en el conflicto sirio.