Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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Por Sebastián Turello. El mapa de la Federación de los Autotransportistas de Cargas (FADEEAC) muestra varias provincias argentinas afectadas por el desabastecimiento de gasoil.
Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos (CECHA) y de la Federación de Expendedores de Combustibles de la región centro (FECAC), recordó, en Los Turello, que ya se vislumbraba esta problemática en octubre del año pasado.
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“Y llegamos a esta crisis de la energía en Argentina. Por un lado, estamos ante una situación que podría haber sido prevista y, por el otro, un Gobierno que no tiene un plan”, lamentó Bornoroni.
Bornoroni: “Tenemos (para extraer) gas para 200 años, pero importamos barcos gasíferos en invierno”.
Y agregó: “Tenemos (para extraer) petróleo no convencional para 100 años y gas para 200 años, pero importamos barcos gasíferos en invierno. A la Argentina, le está faltando un plan para que vengan a invertir, para que podamos ser autosuficientes y para exportar lo que sobra (…) ¿Vamos a incentivar las inversiones en Vaca Muerta o vamos a seguir como hasta ahora? Porque si seguimos como estamos, vamos a caer otra vez en un problema de escasez de combustible”.
En su momento, el ministro de Servicios Públicos de la provincia de Córdoba, Fabián López, también manifestó su descontento ante la política energética nacional: “Está a la deriva desde hace muchos años, lo que agrava aún más los problemas en 2022”.
¿Y ahora?
Para evitar el faltante de gasoil, el Gobierno nacional decidió elevar el corte con biodiésel e instrumentar beneficios impositivos para las refinerías que importen el combustible.
“Son medidas que nosotros las dijimos en diciembre del año pasado (…) si se llevan a la práctica inmediatamente, en 15 días vamos a tener el mercado estabilizado”, estimó Bornoroni.
Según el titular de la CECHA y de la FECAC, incrementar 5% el corte con biodiésel equivale a 14 barcos menos, que suelen demorar aproximadamente un mes en llegar. Por supuesto, esto evita que se vayan más dólares y, en consecuencia, mejora la balanza comercial.
Mientras tanto, el Gobierno nacional autorizó una suba de 12% en el gasoil.
Si bien el precio del litro del gasoil común ya supera los 120 pesos en los surtidores, Nicolás Pino, presidente de Sociedad Rural, denunció que en una estación de servicio de Corrientes se vende a $300. “Esta es la realidad de la Argentina”, publicó en Twitter.
¿Y los demás combustibles?
Bornoroni no descartó nuevos aumentos en virtud de la diferencia entre el precio local que se paga por el petróleo (casi 70 dólares el “barril criollo”) y el internacional (120 dólares); los recientes cambios en la cotización de la divisa norteamericana y las actualizaciones postergadas en el impuesto sobre los combustibles líquidos (ITC) y sobre el dióxido de carbono (IDC).