Por Matías Plaul, gerente de Producto de Banghó. Internet de las Cosas (o IoT, por sus siglas en inglés) está transformando nuestro mundo de sistemas desconectados hacia otro, de dispositivos conectados a Internet que pueden comunicarse o relacionarse unos con otros en la nube. De esta forma, representa una oportunidad para mejorar la productividad y la eficacia de los negocios, desarrollando nuevos servicios y optimizando la toma de decisiones en tiempo real.
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IoT se trata de una trasformación en las relaciones entre los objetos y las personas e, incluso, entre los propios objetos, que cambiará la forma en cómo el mundo interactúa. Hoy, se está convirtiendo en un concepto cada vez más común en las conversaciones de las áreas de tecnología, pero también está formando parte de nuestra vida.
Internet de las Cosas es la creación de un mundo con infinitas posibilidades.
❝IoT se trata de una trasformación en las relaciones entre los objetos y las personas e, incluso, entre los propios objetos, que cambiará la forma en cómo el mundo interactúa❞
IoT es, básicamente, la digitalización de las cosas que tradicionalmente funcionaban offline y que ahora comienzan a formar parte del ecosistema online. Este último, nutrido ahora por relojes o brazaletes, con diversos sensores y con la capacidad de complementar a un smartphone, hasta ropa con biometría, zapatos con posicionamiento global y otros dispositivos que nos permiten “sentir” a distancia (tacto, presión/fuerza, temperatura). Algunos de los ejemplos de que componen loT y que tendrán presencia en el día a día de lo usuarios.
Al coexistir miles de millones de dispositivos inteligentes conectados, desde chips minúsculos hasta máquinas gigantescas que usan la tecnología inalámbrica para comunicarse entre ellos, la Internet de las Cosas, seguirá avanzando con un ritmo impresionante en 2017.
En Argentina son varios los fabricantes que están prestando atención a este cambio. El campo de la IoT está en evolución permanente, y tan rápida, que no hay barreras. Todo está por construirse. Si se realiza una revisión rápida de los pronósticos publicados por referentes como IDC, Gartner, Cisco o Intel, se encuentra que los dispositivos conectados para el año 2020 varían desde unos 26 mil millones hasta unos 200 mil millones.
A medida que esta integración se expanda, la IoT enriquecerá la vida cotidiana, mejorará la eficiencia de los gobiernos, transformará los negocios y aumentará la productividad. Los próximos dispositivos serán más fáciles de usar y se adaptarán a las necesidades de cada usuario. Todos estos equipos sumarán nuevas experiencias vinculadas a la computación perceptual, que transformará la manera en la que los usuarios se relacionan con PCs, notebooks, Ultrabooks, smartphones y otros dispositivos.