Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en...
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Por Sebastián Turello. Según un informe de la consultora Adecco, en base a datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE; pruebas PISA), en el país hay 765 mil jóvenes «Triple Ni» de entre 18 y 24 años que «ni estudian, ni trabajan, ni buscan empleo». La cifra supera el millón, en el caso de los «Ni-Ni».
El estudio, que cuenta con el aval del Ministerio de Educación, sostiene que en la Argentina hay 4,4 millones de jóvenes en ese rango etario.
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Por contraste, hay jóvenes Sub 35 que se destacan, además de sus cualidades profesionales, por sus condiciones morales y aportes a la sociedad. Tal es el caso de Juan Vidal, quien fue distinguido recientemente por la Bolsa de Comercio de Córdoba, como uno de los 10 Jóvenes Sobresalientes.
Su nombre completo es Juan Domingo Vidal. Es oriundo de Cosquín, donde actualmente reside con su familia. Tiene 29 años. En 2008, se recibió de ingeniero mecánico aeronáutico.
Desde 2009 trabaja en el área de Diseño de Estructuras en la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA). Allí, lidera el Programa IA-100, a través del cual un grupo compuesto por más de 90 personas y 12 PyMEs nacionales, trabajan en el diseño, desarrollo y puesta en vuelo de un avión de entrenamiento biplaza acrobático. El IA-100 sentará las bases del IA-74, un avión con características definidas por la Fuerza Aérea Argentina.
También es profesor de Matemáticas en el Instituto Nuestra Señora del Rosario de la ciudad de Córdoba.
Más allá de su pasión por la enseñanza y los aviones, su hobby, como el de muchos argentinos, es el fútbol. «Intento volar alto, pero siempre con los pies en la tierra«, dijo sonriente en su visita a Los Turello. A continuación, el video y las frases más destacadas de la entrevista.
-¿En qué consiste el programa IA-100?
-El programa IA-100 tiene varias fases. La primera, en la que estamos trabajando, consiste en el desarrollo de un avión demostrador tecnológico. Haciendo una analogía con la industria automotriz sería un ‘concept car’. La idea de este avión (el IA-100) es sentar las bases para el desarrollo de una aeronave de entrenamiento elemental (de pilotos civiles y militares). A nivel civil, el objetivo es que se renueve la flota de aeronaves y que los aeroclubes tengan un avión acorde a las nuevas tecnologías.
-¿Ya se hizo un vuelo de prueba?
-Hicimos un primer vuelo inaugural en agosto y, luego, cuatro vuelos técnicos más.
-¿Los componentes son de industria nacional?
-La mayoría de las partes del avión (IA-100) provienen de la industria nacional. Tiene un contenido local del orden del 70%; número que duplica o triplica a los de la industria automotriz.
-¿En qué proyectos estás trabajando de cara a 2017?
-De cara al próximo año estamos trabajando con potenciales clientes, tanto civiles como militares. Hemos llevado a cabo diversas jornadas con aeroclubes y estamos trabajando con nuestra Fuerza Aérea Argentina a los fines de proporcionarles el producto que ellos requieren. Ese desarrollo, que encararía la Fábrica, sería el IA-74.
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-¿Cómo te sentís luego de haber recibido esta distinción de la Bolsa de Comercio de Córdoba?
-Me siento muy orgulloso. Muy satisfecho. Con el sabor de haber cumplido un deber que es cumplir objetivos en el corto y mediano plazo (…) Es un empujón para seguir adelante.
-¿Qué le dirías a los jóvenes, especialmente a los «Ni-Ni»?
-Lo primero que les diría es que, más allá de cualquier carrera o profesión que elijan, siempre persigan ser buenas personas. Por otro lado, que aprovechen el tiempo y cada oportunidad que les da la vida. Que no se autolimiten porque ponerse ‘un techo’ es lo peor que pueden hacer. Que nunca pierdan la humildad y no olviden los orígenes que, hoy, nos permiten estar donde estamos.