Después de 90 días sin torneos oficiales, volvió la mayor pasión de los argentinos: el fútbol. ¿Cómo enfrentan los tres principales clubes cordobeses esta etapa, con dos equipos en la Primera A -Talleres y Belgrano- y con Instituto que quiere ser protagonista en la Primera B Nacional? ¿Cuánto aportan los socios? ¿Qué pasa con los barrabravas? ¿Los clubes están fundidos por una mala administración o corrupción de la dirigencia?

En un programa especial de Los Turello y luego del debut de los equipos cordobeses en los máximos torneos, esos temas fueron analizados por Andrés Fassi, presidente de Talleres; Abraham Rufail, vicepresidente de Belgrano, y Gastón Defagot, titular de IACC. Aquí sus principales definiciones.

Andrés Fassi, Gastón Defagot, Abraham Rufail y Pablo Giletta participaron en Los Turello.

El fútbol argentino según los dirigentes locales

En el comienzo del programa, Fassi habló de los desafíos que afronta la AFA y cómo debe organizarse esa institución. «Fue un proceso devastador, por lo que va a requerir un largo tiempo su recuperación», señaló. Sugirió un modelo con sponsors diferentes para los diversos torneos, con marcas alternativas.

«Hay que hacer valer los estatutos en AFA, que no se cumplieron. No hay código, no hay palabra, no hay valores. ¿Qué dijo (Armando) Pérez cuando asumió? Hay que cumplir los estatutos vigentes. Esto sería un gran paso», enfatizó Fassi.

Además el presidente de Talleres hizo un balance del fútbol argentino destacando como aspectos positivos: el talento de los jugadores argentinos, los modelos de gestión de algunos clubes de fútbol que han podido crecer en un contexto adverso y la pasión/preparación de ciertos dirigentes. Por otro lado, como aspectos negativos, mencionó la falta de una visión global compartida por todos los clubes, la pérdida de valores y la capacidad de algunos dirigentes.

Por último, Fassi se refirió a las trabas culturales y a los prejuicios que existen en Argentina, a la hora de que los inversores privados, y las sociedades anónimas, gestionen los destinos de las instituciones deportivas. Más detalles en el siguiente video.

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En el piso, estuvieron Rufail y Defagot, quien junto al periodista Pablo Giletta, director de Radio Continental Córdoba. Aquí una síntesis del diálogo.

-Pablo Giletta: Para comenzar, ¿cómo los encuentra este regreso a la actividad?
-Gastón Defagot (IACC): Estamos en una situación difícil, pero creo que se puede salir. Hay que trabajar mucho. Encontré cosas que no tenían razón de ser, pero la idea es mirar para delante y pensar en el futuro. No es fácil la situación en Instituto, pero se puede salir. Belgrano y Talleres estuvieron en situaciones similares y salieron. Trabajando y aprendiendo de estas experiencias.

-Juan Turello: ¿Cómo hizo Instituto que hace 8 ó 9 meses estaba al borde de la quiebra y ahora incorporó 14 jugadores?
-Defagot: Se incorporaron 14 nuevos, pero se han ido otros 14. Teníamos una herencia pesada con siete jugadores, cuyos contratos llegaban a 700 mil pesos. Ahora, el presupuesto es 20% más que el del año anterior, que es la inflación.

-Giletta: ¿Y a Belgrano cómo le fue? 
-Abraham Rufail: Afortunadamente, nos encuentra bien. Tenemos un ejercicio saludable de no gastar más de lo que se puede. Algunos dicen que hay que romper el chanchito, pero no hay chanchito. Si tenés 10, tenés que gastar 10, no se puede gastar 30. Asumimos con un club quebrado. Se pudo revertir la situación y hoy nos seguimos manejando con un criterio empresarial. Hay un atraso en los pagos de AFA por la televisación. Es un golpe que pudimos absorber, pero un parate de 90 días en el fútbol, no sucede en ningún lugar del mundo.

-Juan Turello: ¿Cuál es el diagnóstico para que los clubes lleguen a esta situación, prácticamente fundidos: mala administración, socios que no pagan las cuotas, dirigentes que se enriquecieron?
-Rufail: Belgrano llegó a una situación de quiebra en 2001 por malas administraciones, con malos manejos en algunos casos y maliciosos en otros casos. La existencia de dirigencia sin control, sin compromiso, sin freno, te puede llevar a competencias (económicas) con clubes de Buenos Aires, que no podemos sostener. Tenemos que saber cuáles son nuestras potencialidades y nuestras limitaciones.

-Pablo Giletta: ¿Se puede sincerar el fútbol de un día para otro o en seis meses, ya que hay clubes que se habían acostumbrado a vivir del Estado, de la televisión, del Gobienro? Muchos clubes de la B Nacional están en esa situación.
-Defagot: Exige un cambio cultural. En la AFA, había clubes que dirigían a quién se daba el dinero y a quién no. Tenía que ir a la AFA a pedir una dádiva, generando la deuda que hay en todos los clubes. Había comisiones que eran mal manejadas y otras que eran manejados por ‘vivos’. Esto es un cambio cultural, y –como dice Fassi- hay que hacer cumplir los estatutos. Eso es lo primordial.

-Juan Turello: ¿Los clubes van a avanzar en una sociedad anónima o esto lo rechazan los hinchas?
-Defagot: No estamos maduros para pensar en un club privado. El club debe ser de nuestros socios y trabajamos para que el club sea de nuestros socios. Lo otro es una tendencia mundial que, seguramente, en algún momento nos tocará. Pero no estamos maduros ahora.

-Giletta: ¿Qué peso tienen los socios en el presupuesto de los clubes?
-Rufail: Nosotros arrancamos el torneo con más de 30 mil abonados de cancha sobre un total de 40 mil. Es el 30/32% del presupuesto. Eso, el sponsoreo y la venta de algún partido importante, nos permite tener alrededor del 70% del presupuesto anual. El otro 30% viene por los derechos de televisación. Es importante, pero no es determinante para la vida de Belgrano. En Belgrano, existe el compromiso patrimonial de los dirigentes. Si mañana nos vamos y hay una deuda de 10 millones de pesos, la vamos a asumir nosotros. Estaría muy bueno tener una AFA fuerte, con contralor. Hay clubes que tienen deudas enormes y se manejan en el mercado, sacando jugadores a otros clubes… y la AFA mira para otro lado.

-Juan Turello: Los 350 millones extra que vendrían por la televisión para 2017, vendrían con la exigencia de un plan de reestructuración de la deuda de los clubes.
-Rufail: Siempre que vino plata extra, se les dijo a los clubes que debían decir en qué la iban a gastar… y nunca se hizo nada. Venimos de una dictadura de 35 años, donde había dádivas al por mayor y premios por acompañar a la Selección a todos los lugares del mundo… ahora se le exige a Pérez que en 30 días arregle el lío de hace 20-30 años. Es imposible. Y se escucha a dirigentes que no hablaron nunca (…) la muerte de Grondona marca un punto de inflexión en el fútbol mundial.

-Juan Turello: ¿Cómo es la siempre difícil relación con la barra del club, cómo la están manejando?
-Defagot: No he tenido vinculación en esta etapa. Entradas de protocolo no hay; ha cambiado la conducta dentro del club. No existen compromisos. Estamos invitando a nuestros hinchas a que se transformen en socios.
-Rufail: Tenemos 30 mil abonados de cancha. No tenemos relación. Agradecemos el acompañamiento, pero no sucede lo de Buenos Aires y Rosario, donde no se pueden jugar clásicos amistosos.

-Giletta, para finalizar, ¿cómo avizoran el futuro? ¿Qué pasará después de diciembre?
-Rufail: Todos celebran el fin del Fútbol para Todos, que a mí me pareció bárbaro… si lo hubieran vendido y no hubiera servido de espacio publicitario del gobierno de turno. La gratuidad del Fútbol para Todos me parece fantástica, ahora que lo vendan, que no le cueste un peso al Estado, que tiene un montón de cosas de qué preocuparse.
-Defagot: El tema es que el Estado tenga que aportar, que no lo comparto.

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Redacción Turello.com.ar

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