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El peronista Juan Schiaretti fue electo ayer gobernador de Córdoba. Su segundo mandato –había gobernado entre 2007 y 2011- se iniciará el 10 de diciembre próximo. La alianza Juntos por Córdoba (UCR, PRO y juecismo), que postuló a Oscar Aguad, realizó una buena elección y quedó a casi seis puntos porcentuales (cómputos a las 5:44 horas de hoy con el 97,23% de las mesas escrutados). El kirchnerista Eduardo Accastello mejoró la performance de ese sector de 2013, pero quedó muy lejos de las otras dos fuerzas.
Los comicios tuvieron un “plus”: la proyección de De la Sota como precandidato presidencial, al mostrar el apoyo en uno de los distritos clave del país, y la «victoria» de Ramón Mestre en la Capital, otra vez bajo el control del radicalismo.
Al agradecer el apoyo de los cordobeses, Schiaretti destacó que había recibido el saludo de la presidenta Cristina Fernández; “del gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli” (así lo identificó) y de Carlos Zannini (compañero de fórmula del bonaerense) y de Mauricio Macri, entre otros. Schiaretti aludió al reconocimiento que recibía de kirchneristas y del PRO cuando sus candidatos locales –Accastello y Aguad- aún no habían reconocido su triunfo. El candidato de Juntos por Córdoba recién se comunicó con Schiaretti a las 0.30 de hoy.
El mandatario electo pronunció un discurso contemporizador, con la idea de que en su próxima gestión necesitará de los fondos nacionales para cubrir el déficit de la Caja de Jubilaciones y para obras públicas que necesita Córdoba (rutas, gasoductos y energía).
En cambio, De la Sota –que cerró el acto de Unión por Córdoba- usó la tribuna para su proyecto presidencial y cuestionó con severidad a los dirigentes que minutos antes había elogiado Schiaretti.
Los mayores atributos que le adjudican a Schiaretti están vinculados con su capacidad de gestión de los asuntos públicos (es contador de profesión) y la posibilidad de efectuar un gobierno sin grandes enfrentamientos, como sucedió entre 2007 y 2011, pese al ajuste en la Caja de Jubilaciones.
De la Sota, en tanto, hará valer los votos de Córdoba en la interna del peronismo nacional, tras las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), que se efectuarán el 9 de agosto.
Otro de los «ganadores» de la jornada fue el intendente Ramón Mestre, ya que el radicalismo se impuso con holgura en la Capital sobre el peronismo por casi seis puntos (unos 45 mil votos), según resultados a la hora 2. Esto sucedió pese a los cuestionamientos que exhibe la gestión municipal. Rápidamente sus seguidores proclamaron en las redes sociales su candidatura para los comicios del 13 de septiembre próximo, bajo la consigna de «Mestre sigue». El intendente no estuvo en el bunker de Aguad.