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Los precios se están reacomodando en la Argentina (sí, por cierto, menos en el supermercado). Los trabajadores están cobrando menos porque están suspendidos y porque la crisis golpeó fuerte en su sector. En Córdoba, redujeron los sueldos a los municipales y a los jubilados provinciales. Y los precios de los inmuebles en dólares tienen una baja que oscila entre 25 y 30%, según la ubicación de la vivienda y las urgencias del vendedor. Repasemos qué pasa en el sector.
El fenómeno fue admitido por una decena de representantes de las principales inmobiliarias de Córdoba en un zoom que organizó el Colegio Profesional de Inmobiliarios (CPI), en el que participaron casi 40 miembros del sector y medios de comunicación.
La actividad fue encabezada por la presidente del CPI, Virginia Manzotti, y moderada por Gustavo Mallea, director académico de la entidad.
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Marcelo Merguerian, de Merguerian Inmobiliaria, fue el primero en reconocer la baja a partir de una experiencia familiar: “Los precios de los inmuebles han bajado entre 25 y 30% en dólares en Nueva Córdoba”, el barrio emblema para la compra de departamentos de uno y dos dormitorios y para el alquiler de unidades.
“El que necesite vender, tendrá que bajar el precio. La rentabilidad también se tiene que acomodar”, sostuvo. Otros panelistas coincidieron en que en la actualidad la rentabilidad del inmueble es de 1,5% anual en relación con su valor.
Tomás Juárez Beltrán (Juárez Beltrán Asesores Inmobiliarios) recordó que los precios ya se acomodaron tras las sucesivas devaluaciones de 2017, 2018 y de este año.
Dentro del crítico panorama, Sergio Villella (Sergio Villella Bienes Inmuebles) fue el más optimistas en relación con los próximos meses: “La pandemia ayudó a una baja muy profunda en los precios. Los inversores van a salir en busca de oportunidades. Se vienen buenos tiempos en los próximos seis meses”, auguró.
Antes Villella había señalado cómo el metro cuadrado por departamento perdió valor en los últimos años. “En enero de 2018 valía 1.550 ; a mediados del año pasado costaba 1.450 dólares y hoy se consigue a 1.380. Estamos verificando bajas de entre 20-25% en dólares”, reconoció el dirigente quien fue presidente de la Cámara de Corredores Inmobiliarios (CACIC).
La mayor parte de los participantes en panel coincidió en que los argentinos tienen mucho dinero, ya sea que esté “guardado en el colchón o en la caja de seguridad”, disparó Sergio Bellomo (Inmobiliaria Bellomo). «El reaseguro (de esas inversiones) tiene que ser sí o sí en los inmuebles”, enfatizó.
Varios expositores del sector inmobiliario señalaron que la crisis es una oportunidad para revalorizar las inversiones en ladrillos.
Con más de 40 años en la actividad, Bellomo pronosticó que la demanda se concentrará en locales para alimentos y de salud. “Se viene una baja de precios”, coincidió en la apertura de las exposiciones. Pidió concentrarse en la liquidez de los “clientes y no en la liquidez bancaria”.
Juan Carlos López, ex titular del CPI y al frente de Terra Inmobiliaria, dijo que los desafíos “son el mercado de la renta y el mercado de la venta”. Sostuvo que habrá que “repensar el negocio” y pronosticó que en las futuras operaciones habrá “elementos subjetivos” que pesarán a la hora de vender.
Donato Latella Frías, con campo de acción en la zona de barrio General Paz, insistió en varias ocasiones que “hay que olvidarse del dólar” en relación con el precio del inmueble, y pidió fijar un índice no oficial para conocer el costo de la construcción y el valor de las propiedades.
Las intervenciones de Joaquín Malbrán (Inmobiliaria Eduardo Malbrán) y de Sebastián Rodríguez Metayer (Cedin Córdoba) apuntaron a la modernización del negocio, a través de la oferta digital y la visualización de los inmuebles con videos y fotografías, la firma digital, el boleto electrónico y el seguro por internet.
“El real estate se mueve en la red”, dijo Rodríguez Metayer. Otros participantes señalaron, no obstante, que el trato personal es el que termina por cerrar una operación inmobiliaria, sea una venta o un alquiler.