Por Juan Turello. Por momentos, Argentina suele estar aislada del resto del mundo en relación con las guerras y los cambios tecnológicos y geopolíticos. No obstante, las novedades en otros países impactan en la economía local, señala mi nota en La Voz.
Brasil -el principal socio comercial de nuestro país- soporta desde hace semanas una crisis cambiaria a partir del fuerte déficit fiscal de la gestión de Lula Da Silva. El real se devalúa frente al dólar.
Además, por cosechas récord, caen el precio de la soja y de sus derivados y el futuro gobierno de Donal Trump anticipa una economía más cerrada. Repasemos.
Por Andrés Sperman -economista investigador del ICDA de la Universidad Católica de Córdoba-. El Índice de Clima de Negocios e Inversión en Córdoba (ICNIC) mostró en el segundo trimestre una leve mejora, sin embargo, las expectativas futuras permanecen estancadas.
¿Estamos o no en default?, se preguntaban anoche los argentinos interesados en saber cómo había terminado el “Día D” en la negociación con los fondos buitre.
Hubo tres definiciones: la del ministro Axel Kicillof: No estamos en default; la del mediador Daniel Pollack: Inminente default, y de la calificadora Standard & Poor’s: Default selectivo (SD). A esto se agregaron los trascendidos sobre un posible acuerdo de bancos argentinos con los fondos buitres, que se daba por cerrado el martes por la noche y, aparentemente, se habría caído, según los datos que circulaban a la medianoche.
Las entidades empresarias y el gremio del sector pusieron el grito en el cielo: entre gestiones y la construcción lleva 4 años levantar un edificio en Córdoba, mucho más tiempo que, por caso, en la vecina Santa Fe. Además, el costo en trámites se incrementó 281% en 10 años.
Al filo del default, la Argentina negocia un acuerdo con los #FondosBuitre (como se menciona el tema en la red social Twitter), mientras una sensación de alivio se instalaba en los círculos económicos y financieros del país y del mundo.
El representante de los bancos argentinos, que arribará esta mañana a Nueva York para sumarse a las negociaciones, ofrecería una garantía de U$S 250 millones de que el país no entrará en default o bien comprar la deuda en litigio, por U$S 1.330 millones. A todo esto, el juez Thomas Griesa podría reponer hoy el amparo (stay) que permitirá pagarles a los bonistas que sí entraron a los canjes de 2005 y 2010.
Por Claudio Fantini. En las próximas horas habrá un nuevo test de calidad dirigencial. Si el Gobierno “galtieriza” el default o si la oposición utiliza el paso que decida el Gobierno para arrojarlo en su contra, sea cuál fuere, el resultado del test es preocupante.
Los argentinos saben que estos días son clave para el futuro de nuestro país, aunque muchos de ellos no entienden muy bien de qué se trata el default (no pago de la deuda) y cómo repercutiría en su vida cotidiana. Aquí, 10 preguntas para aproximarse a esa realidad.
El Gobierno nacional y la oposición están sumergidos en una pelea verbal sobre si la Argentina caerá o no en default. Mientras, los argentinos se preguntan cómo repercutirá en su vida cotidiana la no liquidación a los tenedores de bonos de deuda canjeados en 2005 y 2010 y el no pago a los fondos buitres.
Aquí, cómo impactará sobre el dólar, los créditos y el empleo el casi seguro default.
Por Juan Turello. Los funcionarios de Cristina Kirchner pretenden quitarle dramatismo a lo que sería una mala señal. Aquí se llamará ❝default técnico❞ o ❝default administrado❞, pero para el mundo será una pésima señal de un país con mala reputación, señala mi nota dominical en La Voz del Interior.
Con la caída de la actividad, el tema del empleo volvió a colocarse en el podio de las preocupaciones de los argentinos.
Esta semana se registraron tres datos que pueden dar forma a un semáforo. ● Rojo: los comerciantes quieren cerrar los domingos (podría afectar el trabajo de miles de personas). ● Amarillo: De la Sota le apuntó a las automotrices. ● Verde: pese a la demanda, no se consigue personal calificado (ingenieros, entre los más solicitados). Ampliamos, a continuación.
Por Luciana Basílico (periodista de Pulso Turístico). Más allá de las “buenas” expectativas que las entidades oficiales depositan en estas vacaciones de invierno (ya finalizadas en algunas provincias), la coyuntura económica muestra facetas poco optimistas para el sector turístico. Leer +